Conductores, el mayor colectivo de votantes del país
jueves 22 de mayo de 2014, 09:33h
"Multan a un sordomudo por hablar por teléfono",
"Multan a un conductor por girar la cabeza 45 grados", "multan por pisar
el arcén para dejar paso a una ambulancia", multan, multan, multan. Las
multas son un impuesto más que se suma a los conocidos IRPF, IVA, SS,
Patrimonio, IBI, Basuras, Energías, Matriculación, Circulación e
interminables tasas de distinto pelo que se recogen ya como unos
ingresos ciertos en los Presupuestos del Estado.
Son sanciones que contienen cada una de ellas tanta amoralidad y con
unos objetivos tan distintos a los de prevenir, informar y ayudar a los
conductores, que resulta difícil congraciarse con los sancionadores. El
único objetivo es recaudar y los que sancionan a pie de calle también
son victimas de un Montoro que, necesita su legión de uniformados al
máximo rendimiento para seguir alimentando autonomías, sindicados,
concejales, realeza, Ere, asesores, eurodiputados... y una interminable
nomina de "vampiros" que viven del esfuerzo ajeno.
Entretanto, calles y carreteras muestran un inquietante deterioro
que, por falta de mantenimiento, raya los limites de seguridad en muchos
tramos. Las mismas señales de tráfico no se renuevan en su mayoría
desde hace más de 10 años y tienen el material reflectante caducado. Eso
sí, hay dinero para radares, helicópteros, parquímetros y distintas
maquinas de sancionar.
Incluso, hasta caen en el olvido actuaciones que al compararlas con
lo que se esta viviendo actualmente se quedan en minucias. Recuerdan al
ínclito Corcuera, que mandaba a la Guardia Civil a poner multas para,
con lo recaudado, regalar abrigos y collares a sus fieles y "fíelas". Y a
José María Barreda, ex presidente de Castilla-La Mancha, que tenía 22
coches solo para él, entre ellos aquel famoso Audi de 377.000 euros; o
la flota de 57 coches oficiales de que disponían los concejales de
Gallardón.
Pero ahora toca recaudar votos. El voto de ese ciudadano anónimo al
que, a nada que se le pase cambiar el tique de la hora, Montoro machaca
dejando caer sobre su cabeza todo el peso del sistema... si, al mismo
que saquean su cuenta corriente y le persiguen en su vida cotidiana. Y
esperando hasta el último momento de la campaña electoral, sigo sin
escuchar nada referente a los conductores.
Tratan de captar a todos los colectivos: tercera edad, jóvenes, gays y
lesbianas, toreros y artistas, pero ningún partido, caduco o emergente,
ha dicho una sola palabra sobre los conductores ni sobre el aumento de
accidentes de tráfico. Es posible que no se hayan dado cuenta que el
elemento común que une a un mayor número de ciudadanos en este país es
el automóvil. Veintidós millones de conductores, nada menos. Conociendo
este dato yo no me preocuparía demasiado por lo que diga Artur Mas.