En pleno debate sobre los cambios en la ley electoral municipal, lea la entrevista a Martínez Majo, el alcalde más veterano de la historia

P.- ¿Cuándo comenzó a sentir interés por la política?
R.- Desde muy joven sentí la inquietud política o más bien las ganas de hacer cosas, porque me gusta más la gestión que la política.


P.- ¿Por qué PP?
R.- El Partido Popular es un partido liberal que tiene un amplio margen de personas que, sin coincidir en todo, compartimos lo esencial. Trabajamos con un margen de libertad de acción y de pensar que no existe en otros partidos. Yo soy un creyente del liberalismo y del libre mercado. La iniciativa privada se ha demostrado fundamental en el desarrollo de nuestro país. Además, como alcalde, el partido siempre me ha dejado desarrollar todas las ideas y proyectos. Aún recuerdo cuando en 1996, sin alborotos ni algaradas, creamos en Valencia de Don Juan el Registro de Parejas de Hecho, incluidas las del mismo sexo. ¡Aquello sí fue progresismo!


P.- ¿Qué momento recuerda con más cariño?
R.- Nada más tomar posesión, el 17 de junio de 1995, comenzó el primer reto con la peatonalización de la Calle Mayor. En el mes de agosto, la mayoría de los miembros de la corporación, de todos los partidos, recogimos las firmas de los comerciantes, exigencia de la Junta de Castilla y León en aquel momento, y en los primeros meses de 1996 se llevaron a cabo las obras. Fue la primera, León ciudad nos siguió los pasos con la calle Juan Lorenzo Segura, pero nosotros fuimos los primeros.


P.- ¿Cuál es la mayor obra que se ha realizado en Valencia de Don Juan durante su mandato?
R.- Sería muy largo enumerar todas las obras nuevas y las mejoras realizadas en nuestra ciudad. Han sido muchas y muchos los nuevos servicios puestos en funcionamiento. Siempre he tenido la suerte de trabajar con buenos equipos de personas, dispuestas a trabajar por el progreso y el bienestar de Valencia de Don Juan. Hemos actuado en todos los ámbitos. En patrimonio, por ejemplo, conseguimos la cesión del Castillo y, posteriormente, actuamos en él consolidándolo y, especialmente, en la Torre del Homenaje. También conseguimos la donación y posterior remodelación completa de la plaza de Toros que pronto albergará un museo taurino. Y se han rehabilitado completamente la estación del tren y las tres casillas. Por otra parte, el jardín de los Patos es otra de las obras importantes porque ha significado el disfrute de todos los coyantinos y punto de referencia de todas nuestras ferias y actividades del conocido verano de esta zona. La integración del río en la ciudad, con el paseo y la pasarela peatonal, marcó un antes y un después en el aspecto de nuestra ciudad. Vivíamos de espaldas al río, hoy es un espacio de ocio, deporte, ferias.


P.- ¿Y en cuanto a infraestructuras?
R.- Hemos mejorado todas las infraestructuras. Entre los años 1998 a 2000 llevamos a cabo la renovación completa del alumbrado de la ciudad; se han renovado una parte importante de calles y plazas, y toda la zona centro es semipeatonal. Han sido varios los kilómetros de redes de agua renovadas y ahora nos marcamos el reto de acabar con el fibrocemento y terminar la renovación. Especial atención merecen las travesías urbanas, todas ellas completamente renovadas: las avenidas de Asturias, Rey Juan Carlos, Palanquinos, Pajares, Valderas, Mayorga. Todas con nuevos colectores, aceras, calzadas y alumbrado. Además, se han creado muchas nuevas infraestructuras, pensando todas ellas en muestra amplia comarca y en la gran cantidad de personas que nos visitan, especialmente en verano. La Estación de Autobuses y el aparcamiento de camiones, la Depuradora, la Potabilizadora, el anillo perimetral de agua potable, las pistas de tenis, pádel, y ahora mismo el nuevo campo de fútbol, el recinto ferial de La Isla... son algunas de ellas. La Escuela Infantil, que ha sido puesta de ejemplo y modelo en Castilla y León, la piscina climatizada y nuestro conocido polideportivo por sus piscinas, junto con la Vía Verde y ahora los huertos sociales, o nuestros museos, del Castillo y el MITLE, son señas de identidad de modernidad y de bienestar que hacen más atractiva nuestra ciudad.


P.- En definitiva, que habéis mejorado los servicios a los coyantinos...
R.- Hemos creado, junto con la Diputación y la Junta de Castilla y León, una importante red de servicios de ámbito comarcal. Las antiguas escuelas albergan hoy la sección agraria comarcal de la Junta, las CEAS y el servicio de recaudación de la Diputación y una unidad de ASPRONA, o las CIAS en la antigua estación, la sede de la D.O. TIERRA DE LEÓN en el Mirador de la Condesa, las oficinas y naves de MANSURLE, y lo más importante, el nuevo centro de salud. El colegio comarcal Bernardino Pérez también ha sido completamente renovado y ampliado.


P.- ¿Y qué me dice de la cultura, el deporte y los servicios sociales?
R.- Hemos ampliado, mejorado y potenciado las Escuelas Deportivas y la de música. Nos hemos convertido en la primera ciudad WIFI de España. Además, en 2007 creamos, y hoy mantenemos, las ayudas a la natalidad, al material escolar y posteriormente las bonificaciones en la escuela infantil.


P.- ¿Cuál sería el cambio más significante o importante que ha vivido Valencia de Don Juan?
R.- A lo largo de estos años se han construido más de 2.000 nuevas viviendas, se han generado más de 600 puestos de trabajo y hemos pasado de los 3.600 habitantes censados en 1.996 a los 5.200 hoy en día. Es decir, hemos crecido y lo seguimos haciendo, ahora más lentamente, pero creciendo.


P.- Muchos municipios tendrán envidia de Valencia de Don Juan, ¿cuál ha sido la fórmula del éxito?
Todo se ha basado en tres pilares: las personas que me han acompañado en las labores de gobierno durante estos años; el apoyo de la Diputación Provincial, el Estado y, especialmente, de la Junta de Castilla y León; y la iniciativa y el apoyo permanente de los coyantinos.


P.- También influirá la forma de actuar de su alcalde, ¿cómo la describiría?
R.- Mi lema siempre ha sido: idea/proyecto /realidad y siempre pensando en las personas. Yo creo que las infraestructuras, eso que algunos llaman el hormigón, son para prestar servicio a los ciudadanos y mejorar la calidad de vida y el bienestar. Yo he dicho muchas veces que el hormigón no tiene corazón, pero sí las personas que disfrutan lo que con él se consigue. Hoy somos una pequeña pero moderna ciudad que presta servicios a una comarca eminentemente agrícola y ganadera, y próspera dentro de las circunstancias económicas actuales que estamos viviendo.


P.- ¿Recuerda algún momento especialmente bueno y malo?
R.- La verdad, ha habido muchos buenos y pocos malos. Ha sido una etapa de mi vida intensa, vibrante y apasionante.
Mi mayor orgullo, por encima de todo, es ser alcalde de Valencia de Don Juan y, a esta ciudad y a sus vecinos, le debo todo. Ellos me han apoyado y creído en aquel 'loco' que un día de mayo de 1.995, en la Casa de la Cultura, les dijo, "cerrad los ojos y soñar conmigo". Hoy una parte importante de aquel sueño es la realidad que ahora te describo.


P.- Ese es el bueno, ¿y el malo?
R.- Jamás olvidaré la primera vez en mi vida que fui a los toros (septiembre de 1995) si no fuera porque acababa de ser alcalde y me tocó presidir la corrida y suspenderla al primer toro. Un mar de agua inundó la plaza y quince minutos más tarde había un sol radiante sobre la plaza de toros, pero el ruedo estaba impracticable.


P.- En la actualidad, ¿en qué trabaja el alcalde de Valencia de Don Juan?
R.- En este momento tenemos cuatro grandes proyectos en marcha. Por un lado, la ampliación de los espacios acuáticos del polideportivo, con la ya famosa piscina de olas. Se están ampliando 1.400 metros cuadrados la lámina del agua, lo que significa duplicar las actuales piscinas, consiguiendo ocho variadas zonas lúdicas de baño. Es decir, tendremos el mayor recinto de recreo acuático del noroeste de España. Por otra parte, y una vez conseguida la cesión de manos del INSS del antiguo centro de salud, estamos trabajando en convertirlo en El Centro del Mayor. Un espacio dedicado muy especialmente, como su nombre indica, a los mayores. Allí estarán la Asociación de Pensionistas, un centro de día, la unidad de respiro de Alzheimer, la plataforma del voluntariado, además de ASPRONA y Cruz Roja. El tercer proyecto es el Espacio Joven, que albergará un centro juvenil para todas las edades y punto de información juvenil. Y, por último, dentro del ambicioso proyecto CEITA, en el complejo de La Isla, crearemos un espacio multifuncional ferial y deportivo. Además de todo ello, avanzaremos en el plan de renovación de redes de agua para conseguir en el menor tiempo posible concluir su completa renovación.


P.- Y todo esto, ¿cómo es posible con la actual crisis económica?
R.- Es posible porque Valencia de Don Juan tiene una situación económica inmejorable. Pagamos a todos nuestros proveedores en menos de siete días, según datos oficiales del Ministerio de Hacienda; y generamos remanentes de tesorería todos los años, lo que significa que gastamos menos de lo que recaudamos. Sólo en 2013 fueron más de 330.000,00 euros. Esto nos permite dos cosas. Una, al pagar tan rápido, conseguir los mejores precios del mercado de nuestros proveedores. Y la otra, tener una 'buena hucha' que nos permite afrontar todas estas obras con recursos municipales propios.


P.- Por último, además de alcalde de Valencia de Don Juan, ha ostentado otros cargos públicos, ¿qué tal la experiencia?
R.- En la Diputación tuve la gran suerte de llevar 'áreas bonitas' y en las que me encantó trabajar. Las etapas como responsable de Productos de León fueron de mucho trabajo pero muy gratificantes, y la etapa de portavoz me tocó la parte gris de la Institución y, además de trabajar, aprendí mucho, muchísimo. Pero donde más me involucré y luché fue en el Consorcio del Aeropuerto de León del que fui presidente del 2002 a julio de 2007. Fueron horas, días, noches y muchos viajes a Madrid. ¡Qué difíciles eran entonces las negociaciones con AENA y con Aviación Civil hasta conseguir la pista de 3.000 metros, el sistema de aproximación ILS y la ampliación de los horarios de funcionamiento del aeropuerto! Fue duro pero apasionante y las cifras está ahí, yo no me las invento. Conseguimos pasar de 23.000 pasajeros en 2002 a más de 161.000 en el año 2007. Ningún aeropuerto de España crecía como el nuestro. El trabajo mereció la pena.