Mañana el BCE celebra su reunión mensual en la que, conforme a lo anunciado en el mes de septiembre, desvelará los detalles de los nuevos programas la titulización de activos y compras de cédulas hipotecarias. El presidente del BCE ha indicado en varias ocasiones que la entidad está dispuesta a utilizar todas las herramientas necesarias para favorecer la recuperación económica y lograr la estabilidad de precios. Mañana los mercados también estarán pendientes de si el BCE puede dar algún indicio sobre otras medidas que pueda poner en marcha y si pueden llegar a considerar la compra de deuda soberana. Aunque desde el BCE se señala que las medidas son consensuadas no faltan críticas a las recientes actuaciones del BCE. A finales de la semana pasada el ministro alemán de Finanzas en una intervención ante la Cámara Baja dijo que "no estaba particularmente contento con el plan de compra de activos del BCE". En opinión del ministro, los planes puestos en marcha por el BCE pueden interferir con sus funciones de supervisor bancario, pudiendo generar un conflicto de intereses. Si la expectativa de cara a la reunión de mañana ya era alta, los datos de inflación publicados ayer, y especialmente los de la subyacente que bajó hasta el 0,7% desde el 0,9% de agosto, han hecho que las presiones sobre el BCE aumenten, y reflejo de ello, los nuevos mínimos registrados por el euro.
Si (
No(
