Los dos últimos presidentes de la desaparecida Ceoe-Cepyme de Ciudad Real, en estos momentos en fase de liquidación, Arturo Mesa y Antonio Sánchez Migallón, y el exsecretario general, Álvaro Maldonado, han rechazado "por defectos legales" el embargo de sus bienes como medida cautelar para poder hacer frente de sus posibles responsabilidades en la quiebra de la patronal ciudadrealeña.
El embargo de los bienes ha sido solicitado por el administrador concursal que, al igual que el fiscal, les considera culpables de lo ocurrido con la patronal -a-fectada por una deuda de más de 6 millones de euros y un agujero patrimonial de 2,5 millones--, aunque el juez de lo Mercantil todavía no se ha pronunciado sobre este punto.
Las defensas de los tres acusados han argumentado también que la medida que se ha pedido no guarda "proporcionalidad" con la petición que se les hace y han puntualizado que en el escrito del administrador no se establece cuál es la cantidad concreta por la que habría que embargarles.
Por último, han esgrimido que la cuantía de sus bienes personales está muy lejos de poder responder a las cantidades que se barajan en el caso de la quiebra de Ceoe-Cepyme de Ciudad Real.
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