La Torre Eiffel estrena un nuevo piso de cristal de vértigo

Los turistas que acudan a partir de ahora al monumento turístico de pago más visitado del mundo podrán disfrutar de una primera planta renovada, con un suelo de vidrio y un museo renovado. La experiencia transparente al vacío se completa con paredes también transparentes que sobresalen unos grados hacia afuera redondeando la vertiginosa imagen.

   El lavado de imagen de este monumento, que ha supuesto una inversión de 30 millones de euros, se completará con un espacio de visita que incluye un restaurante, una tienda y un moderno museo, según la sociedad de explotación de la Torre Eiffel (SETE).

   El estudio Moatti-Rivière ha sido el encargado de llevar a término este 'lavado de cara' de la torre durante dos años en los que ha permanecido abierta al público en todo momento.

   La torre Eiffel es visitada cada año por siete millones de turistas. Espaciar y administrar este flujo de gente es uno de los objetivos de remodelación de la primera planta de uno de los monumentos más famosos de Francia.

Respetuoso con la historia

   Este nuevo proyecto busca un mayor disfrute de la torre y París de forma totalmente respetuosa con el monumento y su historia. Según sus creadores los pabellones nuevos tienen influencia de los pilares diseñados por Gustave Eiffel, "adaptándose al carácter oblicuo de la torre".

   Los volúmenes se inscriben en la profundidad y la curvatura de los pilares y las zonas de servicios se encuentran junto a los frontones para conservar la transparencia central.

   "El proyecto ofrece una experiencia mejorada de la torre y de París, una experiencia lúdica y sensorial, un viaje de los sentidos y el conocimiento", aseguran sus creadores.

   Hasta ahora, el primer nivel un tanto sombrío de la torre ha sido una de sus áreas menos visitadas, y la mayor parte de sus siete millones de visitantes anuales entran directo a los niveles más altos.

Selfies al vacío

   El espectáculo de inmersión promete emociones fuertes. En la primera planta del pabellón Ferrié, este espectáculo utilizará proyecciones en el suelo y las paredes para sumergir a los visitantes en los tres universos característicos de la torre: la experimentación del vacío (escalar la torre, caminar sobre sus vigas), las celebraciones y las iluminaciones y la construcción del monumento.

   El pasillo transparente ya ha demostrado ser un éxito entre los visitantes que hacen cola (y se acuestan en él) para tomarse selfies y para disfrutar de una vistas privilegiadas.

   La renovación también supondrá un ahorro de energía ya que se produce 'in situ' gran parte de sus necesidades energéticas: unos paneles solares calentarán parte del suministro de agua caliente del edificio y se utilizará tecnología LED en todas la zonas.

   Construida por Gustave Eiffel, la torre fue terminada en 1889 como parte de una "Exposición Universal" celebrando el centenario de la Revolución Francesa. La torre mide 312 metros de alto y fue el edificio más alto en el mundo hasta que en 1930 lo superó el edificio Chrysler de Nueva York.