Los restos mortales del
torero, a los que se ha hecho la autopsia en el Instituto Anatómico
Forense de Cáceres, fueron trasladados en la noche del martes hasta su ciudad natal,
según ha informado su familia a través de un comunicado de prensa. Las autoridades municipales alicantinas, por medio de su concejal de Asuntos Taurinos,
Andrés Llorens, había ofrecido el coso, de propiedad municipal, para "este gran embajador de la ciudad por todo el mundo", lo que de inmediato fue aceptado por su familia.
Fallecido a causa de problemas cardiacos, según asegura la misma
fuente, Manzanares será enterrado este jueves dentro de la más
estricta intimidad, por expreso deseo de sus familiares, justo después
de que se oficie una misa en su memoria en la Concatedral de San Nicolás
de la capital alicantina.
Del mismo modo, en dicho comunicado
los cuatro hijos del torero,
Ana María, Yeyes, el matador de toros
José
María y el rejoneador
Manuel, expresan su "profunda tristeza por la
pérdida de su padre, al que se sentían muy unidos" y también "agradecen
las muchas muestras de afecto recibidas".
Durante esta misma
madrugada también viajó hacia España desde México el hijo mayor del
diestro alicantino, el matador de toros del mismo nombre, que nada más
aterrizar en la capital mexicana, donde está anunciado para torear el
próximo domingo, recibió la noticia del fallecimiento de su padre. Llegó a Barajas primeras horas de la mañana de este jueves y salió de inmediato hacia Alicante.
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