Artur Mas y Mariano Rajoy en el programa 'Tengo una cosa que te quiero decir'

Parece que el presidente ha tomado aire en las antípodas para decidir no sólo que hablará con Artur Mas sino que visitará Cataluña para decirle al líder catalán que no tiene nada que hacer manteniendo su postura soberanista. Será el próximo sábado cuando el señor Rajoy pise tierras movedizas catalanas y donde se dirija a los catalanes para explicarles, y justificarles sus razones de su enrocamiento.

Una vez hecho el anuncio de la visita, la batalla campal se ha trasladado del ámbito político al  fiscal, aunque sinceramente, quizá nunca han salido del político y una vez más queda en entredicho la separación de poderes. Entre fiscales anda el juego con mandatos incumplidos, querellas que se redactan y luego se retractan, reuniones de salas no vinculantes, y un largo etc que al final, al ciudadano no le dicen nada y que clarifican una ausencia de rigor político.

De todas maneras, yo soy más de cartas que de querellas. Me considero fan, quizá un fan retrogrado de las cartas a mano, en el que hay tachones, renglones torcidos, lágrimas chivatas que decoran la hoja en blanco, y esta semana ha sido también la semana de las cartas. Artur Mas le envió una a Rajoy, que se guardó para leer atentamente en el avión de regreso de su cumbre de presidentes ricos.
Y con este envío de cartas, se me ha ocurrido hablar con algunos amigos míos redactores del programa de Telecinco, "Hay una cosa que te quiero decir", ya verán...

Después de la sobrexposición de Pablo Iglesias en numerosos medios, excepto TVE, parece pues que el ente público debe vivir al margen del resto en una inopia catódica, después de publirreportajes sobre el 9N en televisiones autonómicas o la propia Sexta con un especial 24 horas de la consulta, después de la participación de Pedro Sánchez, secretario general del PSOE en programas del corazón, ahora hay rumores que entre carta y carta de Mas a Rajoy y de Rajoy a Mas, con esa relación de falta de entendimiento, de ausencia de relación, que el programa de Mediaset, " Hay una cosa que te quiero decir" esté preparando un especial reconciliaciones políticas.  Al frente de este sainete político-televisivo se situaría el presentador de moda Jorge Javier Vázquez que a base de vídeos "lagrimógenos" con declaraciones sobre los nacionalistas cuando no eran ratas infectas para los populares y en ese caso se convertían en bedeles de la estabilidad política de nuestro país. Del mismo modo, Artur Mas, para ablandar su independentista corazón, visualizaría videos en los que se podría ver instantáneas en las que los populares les realizaban concesiones y guiños políticos a su querida Cataluña.

Artur Mas podría iniciar la carta de ayuda al programa diciendo algo así. "Querido Jorge Javier, tengo un compañero de trabajo que no me habla, que no me entiende, que me hace bullying, que me ignora y me tacha de loco, y lo único que quiero, es jugar con él a un juego en el que yo pongo las reglas...".

Del mismo modo, los productores del espacio de Telecinco han informado a los asesores del presidente Mariano Rajoy, que el programa cuenta con un plasma a través del cual se puede expresar, sabedores de la afición que tiene el presidente a comunicar como si fuera Matías Prats.

No se descartan visitas interestelares como la del ex presidente Aznar apoyando a su pupilo y traduciendo del catalán la carta escrita por Artur Mas- recordemos que este idioma lo habla en la intimidad y lee a Pompeu Fabra. Por su parte la sorpresa para Mas sería la presencia del president Pujol- me aseguran fuentes de Mediaset que no ha preguntado si esta participación es remunerada-.

Todo sea por el espectáculo de la política o por el espectáculo que dan los políticos.
 
@AitorSagarduy