CiU, que está en minoría, necesita del apoyo de al menos 18 parlamentarios o la abstención de dos de los grupos principales --ERC o PSC-- para que las cuentas salgan adelante, algo que por ahora ninguna de estas dos fuerzas está dispuesta a hacer.
Los republicanos sólo están dispuestos por apoyar una prórroga presupuestaria y anticipar las elecciones para proclamar la independencia la próxima legislatura, y los socialistas han anunciado una enmienda a la totalidad, algo que también han anunciado ICV-EUiA, PP, CUP y C's.
El proyecto de presupuestos que ha registrado en el Parlament el conseller de Economía,
Andreu Mas-Colell, prevé para 2015 unos ingresos de 19.981 millones, unos gastos de 22.481 millones --de los cuales el 71,2% corresponden a gasto social-- y un déficit del 0,7% del Producto Interior Bruto (PIB).
El objetivo de Mas-Colell es que buena parte del diferencial de 2.500 millones entre gastos e ingresos se obtenga del Estado, y que pague parte de su "deuda histórica" que mantiene con Cataluña.
Concretamente, se pedirá al Estado que pague 789 millones de euros por el fondo de competitividad, 635 por compensar el impuesto de depósitos bancarios y otros 759 millones con concepto de la disposición adicional tercera del Estatut en 2010, que establecía que las inversiones del Estado en infraestructuras en Cataluña tenían que equivaler a la contribución que hace esta comunidad al total del Producto Interior Bruto (PIB).
Según Mas-Colell, el Govern es consciente de que no puede conseguir más activos mediante externalizaciones y privatizaciones, después de que en 2012 se desprendiese de Aigües Ter Llobregat (ATLL) --operación en los tribunales--, de la concesionaria de las autopistas de peaje de los túneles de Vallvidrera y del Cadí, y de varios inmuebles a lo largo de los últimos años.
Al mismo tiempo, ve "de justicia" que en 2015, los empleados públicos recuperen las 14 pagas y que los interinos vuelvan a trabajar el 100% de su jornada y al sueldo, frente a la reducción del 15% que han sufrido durante los últimos tres años.
CUENTAS NECESARIAS Mas-Colell ve necesario que el Parlament apruebe a principios de febrero los Presupuestos de la Generalitat para 2015 haya o no elecciones anticipadas en Cataluña.
"En tiempos de tanta incertidumbre, es mejor que tengamos estructurado el funcionamiento diario de las finanzas de la Generalitat", por lo que ha hecho un llamamiento a la oposición a actuar con "perspectiva de realismo".
En nombre de ERC, el diputado
Pere Aragonès ha instado al Govern a consensuar un acuerdo político que incluya una prórroga de las cuentas --con la aprobación de crédito correspondiente que permita que acaben los recortes para los empleados públicos-- y la convocatoria de elecciones "lo más antes posible", con el fin de tener un mandato democrático que permita proclamar la independencia en la próxima legislatura.
El portavoz del PSC en el Parlament,
Maurici Lucena, ha tildado de "fantasía" el proyecto de presupuestos, que no apoyará este partido, como ha dejado claro desde Bruselas su primer secretario, Miquel Iceta, que ha lamentado que el Govern no haya aceptado su oferta de acuerdo de estabilidad y se ha mostrado convencido de que habrá elecciones "muy pronto".
Por su parte, desde Lleida, la líder del PP de Catalunya, Alicia Sánchez Camacho, ha anunciado que su partido presentará una enmienda a la totalidad a los Presupuestos porque son "ficticios, irreales, engañosos, con un capítulo de ingresos falseado".
ICV-EUiA ha cargado también contra unas cuentas que fían parte de sus ingresos a la negociación con el Gobierno y que consagra a los empleados públicos como moneda de cambio.
C's ha dicho que los presupuestos serán "papel mojado" si hay adelanto electoral, y la CUP ha reivindicado el impago de aquella parte de la deuda pública que no es legítima.
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