El Consejo de Seguridad de la ONU sanciona a Irán por su programa nuclear

  El Consejo de Seguridad fue unánime en su respuesta a Irán y advirtió que de no desistir, podría adoptar más medidas. De no cumplir con la resolución, la ONU informó a Irán de que el Consejo de Seguridad podría adoptar más sanciones no militares. Esta resolución, además de embargar material específico y tecnología que pudiera emplearse para el desarrollo de los programas nuclear y de misiles, también impone la congelación de los activos de determinadas empresas e individuos implicados en los programas iraníes nuclear y de misiles.

   Hasta el último momento no se supo si los 15 miembros del Consejo de Seguridad apoyarían la resolución, ya que Rusia y China, ambos con poder de veto, tienen importantes lazos comerciales con Teherán y se mostraron a favor de una imposición progresiva de sanciones. Además, Qatar, miembro no permanente, apoyaba el uso pacífico de la energía nuclear por parte de Irán. Por el contrario, Estados Unidos encabezaba el grupo de países que pedían duras sanciones contra la República Islámica y Francia y Reino Unido apoyaban tímidamente las tesis de Washington. Finalmente se consiguió el visto bueno de Moscú y Beijing con una nueva versión de la resolución. El embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, explicó que su país votó sí para enviar "un mensaje serio" a Irán y "despejar las preocupaciones sobre su programa nuclear".

   Vigilancia

   El embajador de Qatar ante la ONU, Nassir al Nassir, el único representante de un país árabe con asiento no permanente en el máximo órgano de decisión de Naciones Unidas, fue el último en dar su apoyo a la resolución y explicó que votaría sí "porque estamos preocupados por la seguridad de las instalaciones nucleares iraníes".

   La resolución autoriza acciones según el artículo 41 del capítulo 7 de la Carta de la ONU que permite al Consejo de Seguridad la imposición de sanciones tales como la suspensión de las relaciones diplomáticas y económicas, del transporte y las comunicaciones. También pide a todos los estados "ejercer vigilancia" sobre la entrada o el tránsito a través de su territorio de las personas listadas por la ONU por su implicación en los programas nuclear y de misiles del país y pide a los 191 miembros de la ONU notificar la entrada de estos iraníes en sus países al comité especial del Consejo de Seguridad que se creará para supervisar la aplicación de las sanciones.

   Dentro de 60 días el Consejo de Seguridad examinará de nuevo la situación y el cumplimiento por parte de Irán de las exigencias de la resolución a la luz de un informe que encarga a la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA). Si este organismo verifica que Irán ha interrumpido el enriquecimiento y el reprocesamiento, la resolución prevé la suspensión de las sanciones para así permitir la apertura de negociaciones.

   Rechazo iraní

   En lo que a la reacción de Teherán respecta, el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Manuchehr Motaki, mostró su profundo rechazo al texto. "Irán considera la nueva resolución del Consejo de Seguridad de la ONU como un acto ilegal que está por fuera del marco de sus responsabilidades y que va contra la Carta de la ONU", afirmó Motaki en una comparecencia en la televisión pública iraní. "La nación iraní no ha delegado su destino en las inválidas decisiones del Consejo de Seguridad de la ONU y no lo hará (en el futuro)", aseguró.

   "La nueva resolución no supondrá un obstáculo para Irán en su camino hacia el progreso nuclear. La nación iraní proseguirá con sus actividades nucleares pacíficas en base a sus aptitudes nacionales y dentro del marco de sus derechos estipulados en el Tratado de No Proliferación Nuclear". Asimismo, aseguró que Irán continuará con la instalación de más centrifugadoras en su planta de enriquecimiento de Natanz, en el centro del país. "Empezará a funcionar con 3.000 centrifugadoras para continuar con sus investigaciones nucleares pacíficas bajo la supervisión de la Agencia Internacional para la Energía Atómica (AIEA)", concluyó.

   Israel: mensaje a Irán

   Israel, por su parte, celebró la medida. El ministro de Asuntos Exteriores israelí, Mark Regezv, elogió la aprobación unánime de sanciones contra Irán ya que consideró que es un importante paso para impedir que la República Islámica consiga hacerse con armamento nuclear. Regev aseguró que se trata de "un mensaje claro a los líderes iraníes que transmite que su programa nuclear es totalmente inaceptable y que la comunidad de naciones actuará para impedir que el régimen iraní obtenga armas nucleares". Además, opinó que la comunidad internacional "necesita continuar mostrando determinación para alcanzar el objetivo de bloquear el plan nuclear iraní".

   Francia también quiso valorar la nueva resolución y emplazó a Irán a regresar a la mesa de negociaciones o, por contra, a desafiar a la comunidad internacional, lo que agravaría el aislamiento del país. "Hoy más que nunca nuestro objetivo sigue siendo convencer a Irán de que cumpla sus compromisos internacionales", aseguró el ministro de Asuntos Exteriores francés, Philippe Douste-Blazy.