La margarita de Artur Mas

Sí, no, sí, no, sí, no, sí.....¡uf, qué nervios! El presidente de la Generalitat lleva un par de meses deshojando la margarita para ver si convoca elecciones ya o termina la legislatura. Al parecer, según ha anunciado, termina de deshojar la margarita este jueves, de manera que ha llegado la hora de que nos enteremos de las intenciones del Muy Honorable President de la Generalitat.

La verdad sea dicha en estos momentos el "soufflé" independentista se ha desinflado un poco. Hasta el propio Artur Mas es consciente de esto, y no digamos su socio Oriol Junqueras que teme que el paso del tiempo termine diluyendo lo que queda del soufflé.

Claro que con la capacidad de Artur Mas de complicar las cosas, la vida de los catalanes y la del resto de los españoles, tampoco hay que descartar que nos dé una sorpresa de las suyas cuando por fin nos desvele sus intenciones.

Mientras tanto están pasando otras cosas en el panorama político catalán. Por ejemplo la presencia de Podemos que al decir de las encuestas va a ser determinante y va a dejar maltrecho al PSC. Pero todo hay que decirlo, en el PSC son inasequibles al desaliento. Poco les importa que la posición meliflua con el nacionalismo que han mantenido hasta ahora les haya ido restando apoyos, ellos "erre que erre" continúan empeñados en situarse en tierra de nadie, o sea que ni si ni no son nacionalistas pero tampoco lo contrario.

La verdad es que el socialismo catalán ha ido perdiendo identidad a fuerza de hacer el caldo gordo a los nacionalistas de ahí que Podemos se les vaya a quedar con el electorado. Porque en Cataluña, al igual que en el resto de España, el personal anda sobre todo preocupado por el paro, con ver a los hijos emigrar en busca de trabajo, por ver como merman las prestaciones sociales, etc, etc, etc, más que por problemas identitarios.

Pero ya digo que Mas y sus compañeros de viaje, lease ERC, el CUP y demás familia, están más preocupados por la independencia que por los problemas reales de los ciudadanos, y la verdad es que la gestión  de la Generalitat es un desastre porque dedican todas sus energías a la independencia en vez de arreglar problemas.

Los dioses ciegan a los hombres que quieren perder, y hace tiempo que cegaron a Artur Mas. Pero no descartemos sorpresas, está a punto de caer la última hoja de la margarita.