Así lo han explicado en rueda de prensa Olga Ávalos, Juan Carlos del Puerto y Gonzalo Domínguez, que han pedido a "la mayoría social y a la clase trabajadora" que participen en esta marcha contra las políticas de austeridad del PP, que solo han servido para acrecentar el paro --sobre todo el de los jóvenes--, la pobreza, la desigualdad y la represión.
Según ha manifestado Ávalos, coincidiendo con el primer aniversario de la gran manifestación del 22 de marzo de 2014, que concentró en Madrid a centenares de miles de personas que pedían una "vida digna", los organizadores pretenden este año superar la cifra de participantes, aún sabiendo que esta cita coincide con las elecciones de Andalucía y que eso les puede restar fuerza, pues las columna andaluza fue la más numerosa.
Y es que, según han indicado, confían en superar el más del millón y medio de personas que el año pasado ocuparon Madrid organizados en cuatro columnas procedentes de todos los puntos del país, 400 de ellos de Castilla-La Mancha.
Con el objetivo de rodear Madrid, los organizadores de esta gran marcha pretenden canalizar el descontento ciudadano por el pago de una deuda ilegal, reclamar unos servicios públicos de calidad, un trabajo digno, mostrar su rechazo a la precariedad laboral, a la 'ley mordaza', así como exigir el derecho a una vivienda digna y a unos servicios esenciales.
De igual modo, han indicado que se ha creado un grupo de jóvenes, que aglutina a las asociaciones estudiantiles y a las secciones jóvenes de diferentes partidos políticos, entre otros, con el que hacer visible la "difícil y grave" situación que presenta este colectivo, que registra una tasa de paro del 55 por ciento.
Bajo el lema 'Hay que echarles' los participantes toledanos se unirán a los marchantes andaluces en Parla y a los extremeños en Móstoles, "cinturones castigados por la crisis", para poder llegar a la capital.
Tras explicar que los interesados pueden obtener toda la información en 'marchadignidadtoledo.blogspot.com', han adelantado que quienes quieran desplazarse en autobús hasta Madrid pagarán seis euros, tres en el caso de los parados.
La organización establecerá un servicio para evitar que "se reviente" la protesta
En otro orden de cosas, han explicado que al margen de los efectivos que habilite la Delegación del Gobierno para garantizar la seguridad de las marchas, la propia organización ha creado un "servicio de orden", que podría estar integrado por cerca de 400 personas, para evitar que "encapuchados revienten esta protesta" pacífica.
"No queremos que pase lo del año pasado y por eso no vamos a permitir que los que se tapen con capuchas y bufandas vuelvan a intentar boicotear la marcha", ha defendido Ávalos.
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