Blanca Fernández se ha manifestado así en el día en el que toda la Universidad española secunda concentraciones en todos los campus de Castilla-La Mancha, se está movilizando contra esta propuesta.
La diputada socialista ha recordado este hecho y ha considerado que se trata de un paso más hacia la "privatización" de los estudios superiores, dado que, ha dicho, la mayoría de los máster, en la actualidad los desarrollan las universidades privadas.
Fernández ha hecho hincapié en la coincidencia de trabajadores de la universidad, estudiantes y los propios rectores en contra de esta reforma, más cuando todavía no se ha terminado de aplicar la última, el conocido como Plan Bolonia, y no se ha podido evaluar su efectividad.
La parlamentaria del PSOE ha recordado que el rector de la UCLM, Miguel Ángel Collado, ha sido uno de los rectores que se ha mostrado en contra, y ha considerado que la reunión de Cospedal con él serviría para la presidenta tuviera un conocimiento exacto de lo supondrá la citada reforma.
De hecho, el rector recibía ayer a los representantes de las organizaciones estudiantiles y sindicales convocantes de la huelga contra el Real Decreto 43/2015 que modifica la estructura de las enseñanzas universitarias y abre la puerta a grados de tres años y másteres de dos.
Collado ya se había pronunciado en contra de este real decreto en varias ocasiones, entre ellas, ante el propio Claustro de la UCLM, el pasado 11 de febrero.
Representantes de las organizaciones sindicales CCOO, FETE-UGT, CSI?F, STE y de los estudiantes de la UCLM se reunían con el rector para trasladarle las razones que, según estas organizaciones, justifican la convocatoria de una huelga en la universidad pública. El también conocido con decreto 3+2, aprobado el pasado 30 de enero por el Consejo de Ministros a propuesta del titular de Educación, José Ignacio Wert, establece la posibilidad del desarrollo de grados de entre 180 y 240 créditos y másteres de entre sesenta y ciento veinte créditos.
Los convocantes de la huelga consideran que si se generaliza el 3+2 (grados de tres años y másteres de dos), el sistema, "lejos de homogeneizarnos con Europa, generará nuevas disfunciones". Además, apuntan que "la reducción del número de créditos necesarios para finalizar los estudios de grado y la previsible pérdida de estudiantes tendrán un impacto muy negativo en la financiación de las universidades, el empleo y las condiciones laborales del profesorado y del personal de administración y servicios, dando lugar a una reconversión del sector que no vamos a aceptar".
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