Desde Europa piden más medidas correctora en
España. A ellos no les importa que sea año elecciones, de arreglar rotondas y
poner luces en los barrios. Les da igual que al Gobierno les salgan "ratos" por
el lugar más turbio para los electores; el económico. A la UE sólo le preocupa
cumplir sus cuentas, marcar el rumbo establecido y orientas unos ajustes
adecuados a los libros de balances de países pero ajenos a los libros de balances
familiares.
Hoy he escuchado una grabación de una
entrevista hace 25 años, que el señor
Jesús Hermida al que todavía no era ni
súper ministro, ni súper mandatario, ni presuntamente súper estafador, pero es
curioso como el discurso por aquel entonces era la caza y captura del moroso,
del defraudador. Qué lejos quedan esas intenciones y que cerca quedan esas
acciones.
El Gobierno teme que tanta nuevas medidas
pueden provocar un efecto rebote que le haga perder apoyos de aquí a las
elecciones. No es momento de reformas que castiguen al electorado, "no vaya a
ser que el público se nos enoje y vuelva a vernos como los malos de la
película" eso piensan muchos dirigentes del PP. Y eso que otros, como la
vicepresidenta,
Soraya Sáenz de Santamaría se divierta en la feria bailando
sevillanas con su arte castellano.
Si alguno de ustedes ha visto las imágenes,
les habrá llamado la atención el despiste folclórico que tiene la bien hablada
presidenta pero mal coordinada bailaora. Hay algunos que ya la comparan con la
"archi famosa"
Belen Esteban y su paso glorioso por el programa de "mira quien
baila".
Pues eso, que al Gobierno le piden volver a
bailar con el tema más feo, el peor que le pueden poner en la pista de baila;
"el recortao".