"Nuestros amigos pensaban '¿lana?, ¿por internet?' y se echaban a reír"

Alberto Bravo y Pepita Marín siempre supieron que su futuro estaba en el emprendimiento. Por unas cosas o por otras no se aventuraban, hasta que aquella chica que tejía en el metro de Nueva York les cambió la vida... Hablamos con ellos.

¿Cómo surgió la idea de 'We are knitters'?

Cuando trabajábamos en PwC, fuimos a Nueva York a visitar a una amiga. Allí vimos que había tiendas de lana de todos los colores, grosores, procedencias, etc. Se veía a gente joven y cool tejiendo en las cafeterías y en el metro y como todo lo que surge en EEUU acaba triunfando en Europa, decidimos ser nosotros los impulsores de este movimiento en España. Al volver de este viaje, vimos que ese tipo de lana no existía en el mercado español y que, además, la imagen que se tenía de esta actividad era la de una abuelita tejiendo. Fue así como surgió la idea de crear una empresa que comercializara todo lo que necesitas para tejer tu propia prenda dentro de una misma bolsa o kit, pero dando una importancia radical a la imagen actual, moderna y vanguardista de las prendas.

¿Vivísteis en vuestro entorno el '¡estás loco!', 'no lo hagas'?

¡Por supuesto! Muy pocas personas creían en el proyecto que teníamos entre manos. Pensaban "¿lana?, ¿por internet?" y se echaban a reír. Fue una suerte emprender los dos juntos y apoyarnos el uno en el otro. Si hubiera sido por nuestras familias y amigos no lo habríamos hecho nunca. Tampoco teníamos a ningún emprendedor en nuestro entorno. Aunque todo sea dicho, nuestras familias, aunque un poco escépticas al principio, nos han ayudado en todo lo que han podido y más.

¿Creéis que hay un crecimiento en la tendencia de la moda sostenible?

Desde luego. Pero no sólo en la moda, sino en todos los ámbitos: alimentación, decoración, etc. Poco a poco la gente es más consciente de que se pueden obtener productos de calidad, sea el que sea, sin necesidad de recurrir a grandes procesos productivos.

¿Cuál es el motivo de esta tendencia al alza del 'Do it yourself'? ¿Sostenibilidad o moda? ¿La gente se preocupa verdaderamente del medio ambiente o le gusta crear su propia ropa?

Posiblemente sea una mezcla de las dos, aunque probablemente lo que predomine sea el hecho de hacer algo con tus propias manos: nos hemos acostumbrado a estar sentados todo el día delante de un ordenador, con el móvil todo el día en la mano, a ver la TV, etc. Tenemos los ojos pegados a una pantalla desde que nos levantamos hasta que nos acostamos. Ver que eres capaz de hacer algo con tus propias manos y que luego te la puedes poner o incluso regalar a un ser querido da una sensación de autosatisfacción que muy pocas actividades proporcionan. Es un poco como volver a lo de antes, pero con la tecnología del s. XXI.

¿Cuál es el perfil de vuestro público?

Principalmente son tres: el primero sería una chica entre 25 y 40 años, aproximadamente, que lee las revistas de moda, blogs y sabe qué es tendencia.
Otro perfil sería el de una mujer más madura y que teje desde hace años. Nos ha conocido a través de su hija, una amiga, etc. y lo que le atrae es la calidad de nuestros materiales (lana y algodón 100% procedente de Perú).
Por último está el perfil de la persona que quiere hacer un regalo original. La presentación del producto está muy cuidada por lo que casi no hace falta ni envolverlo. Es curioso ver como en diciembre el porcentaje de clientes masculinos crece exponencialmente.

¿En qué consiste un kit de 'We Are Knitters' y cuánto cuesta?

Nuestros kits contienen todo lo necesario para tejer (o hacer crochet y, desde hace poco tiempo también 'Petit Point') prendas de ropa, complementos o artículos de decoración: ovillos, agujas, patrón y agujita lanera. El producto final se puede personalizar eligiendo el material, el color y las agujas. Hemos ido ampliando nuestra gama de materiales para darle al público lo que demanda. Comenzamos con lana gorda y de ahí hemos evolucionado a la lana final, el algodón (para superar la estacionalidad), el trapillo...

Los kits pueden adquirirse en nuestra web weareknitters.com desde 25 hasta 105 euros.

                                                                                            

¿Cuál es vuestro producto estrella?

Los kits y ovillos de lana gorda. Es nuestro producto más característico y diferencial: es de un grosor y de unos colores muy marcados que son difíciles de encontrar en otras tiendas. En cuanto a producto lo que mejor funciona son los cuellos. Son muy fáciles de tejer y se hace muy rápido.

Habéis cruzado fronteras, ¿no?

Sí. Empezamos en España porque éramos españoles y era el paso natural, aunque la verdad no sea el mejor mercado para crear una empresa de lana. Desde el principio tuvimos clara nuestra vocación internacional, de ahí que el nombre de nuestra marca sea inglés, pero también consideramos necesario que tener, tanto nuestra web en inglés como nuestras redes sociales. Esto nos permitió comenzar a recibir enseguida pedidos de fuera de España, principalmente de Alemania. Éste es un país en el que existe una mayor tradición de tejer y el clima acompaña mejor. Después de ver que funcionaba muy bien nos decidimos a probar en Francia y actualmente estamos empezando poco a poco con Estados Unidos, lo que supone un enorme reto para nosotros, aunque siempre ha sido el objetivo que teníamos en mente porque en este país existe un mercado potencial de 38 millones de tejedores. Ahora mismo España tan solo representa el 30% de la facturación anual.

¿Cuál es lo más gratificante y lo más duro de emprender?

Lo más gratificante es sin duda, ver el resultado, cuando la gente nos felicita. Muchos emprendedores trabajan tanto como nosotros sin obtener frutos.

Lo más duro, el sacrificio que tienes que hacer a todos los niveles. Nosotros tuvimos que renunciar a muchas cosas hasta llegar a donde hemos llegado: viajes, planes con amigos, tiempo libre, descansar, un sueldo fijo etc. Si alguien nos lo hubiera dicho al empezar, a lo mejor nos lo habríamos pensado dos veces, aunque sinceramente, creo que lo volveríamos a hacer con los ojos cerrados.

Para muchos emprendedores lo complicado es el '¿por dónde empiezo?', ¿cómo comenzásteis esta aventura vosotros? ¿Un consejo para los que se lanzan al autoempleo por primera vez?

Bueno en nuestro caso, al tener un producto físico, empezamos buscando y contactando a posibles proveedores. Es lo que más tiempo nos llevó. Como consejo, nosotros diríamos que si tienen un producto lo suficientemente presentable, que lo lancen, es decir, que no esperen a que esté perfecto al 100%. A lo mejor dedicas recursos, ya sea tiempo o dinero, a algo que luego el mercado te rechaza. Es preferible lanzar algo mejorable y que sea tu público el que te indique qué cosas debes mejorar y cuales están bien.

¿Cómo afrontáis el verano con un producto tan ligado al frío? ¿Se teje con calor?

Es cierto que tejer es una actividad que se practica más en invierno, pero aún así nosotros proponemos otros materiales, como son el algodón y el trapillo. Puedes tejer prendas más frescas como camisetas y vestidos y elementos de decoración como cestas, alfombras o mochilas.

Y vosotros, ¿tejéis? ¿Tenéis tiempo para ello?

¡Pues la verdad es que no tanto como nos gustaría! Al principio tejíamos nosotros mismo los prototipos para los patrones, pero con el tiempo tuvimos que dejar de hacerlo ya que el negocio requería que nosotros nos dedicáramos a otras cosas no tan relajantes la verdad. Aún así, sí que nos gusta practicarlo cuando podemos y nos ponemos nuestros propios gorritos y cuellos...presumimos de ellos con nuestros amigos y todos se mueren de envidia.