Tormenta política en torno a Ciudadanos Málaga

Y es que la estrategia del asturiano ha tomado un rumbo desconocido. ;El
mismo lunes ya se significó y se posicionó abiertamente ante el estupor
de todos, después del triunfo electoral que pone a Ciudadanos en una
situación muy ventajosa para propiciar el gobierno en la Casona del
Parque y de adoptar decisiones de gran calado a nivel orgánico en la
provincia, en los municipios de Torremolinos, Mijas y Rincón de la
Victoria, donde las negociaciones son claves para el reparto de estas
corporaciones locales, amén de las negociaciones para gobernar la
Diputación, que se ha quedado al borde de la mayoría absoluta tras
conocerse el reparto de escaños del ente supramunicipal.

El
'culebrón' malagueño de la formación naranja arrancó cuando
sorprendentemente Juan Cassá recurrió a las técnicas de la vieja
política y dejó plantados a varios medios de comunicación para visitar
sólo uno. Allí, su elocuencia se desató en demasía para afirmar su
querencia por el bastón de mando. "Quiero ser alcalde" ha sido la
expresión más comentada en las últimas horas en todos los foros y redes
sociales, respecto a su postura sobre posibles acuerdos para ; encauzar el gobierno local.

La
afirmación vertida en el diario 'Sur', indudablemente, no puede quedar
como mera anécdota si procede del representante de un partido que ha
mostrado durante la campaña electoral su rechazo por activa y por pasiva
a ostentar cargos en los ayuntamientos. El primer extrañado ante tamaña
afirmación ha sido el propio alcalde en funciones Francisco de la
Torre, quien ha asegurado a 'Sur' que "le parece mal" que Cassá quiera
ser alcalde cuando ha expresado que "no quiere cargos ni carguitos". ;

A
pesar de que esta nueva directriz ha sido esgrimida por el propio
Albert Rivera: "no esperen a C's donde no seamos alcaldes o
presidentes", se está empezando a dilapidar esta estrategia, a
desvirtuar este mensaje en sí mismo tras las maniobras desde la cúpula
de Ciudadanos Málaga con las aspiraciones de Cassá a liderar la
alcaldía.

Desacertado
también estuvo al no cogerle el teléfono a Francisco de la Torre, quien
parece ser le llamó en dos ocasiones y finalmente le fue imposible
contactar con él. Parece ser que su jefe de prensa fue quien atendió las
llamadas y le transmitió que Juan Cassá no podía atenderle.

Este
terremoto político se acrecentó aún más con una nueva afirmación del
líder malagueño de C'S. Según el presidente en funciones de la
Diputación, Elías Bendodo, Juan Cassá "quiere la alcaldía de Málaga",
publica el periódico 'Sur'. Bendodo asegura que tras los primeros
contactos con Ciudadanos, el partido naranja le "facilitaría el gobierno
provincial y el de todos los gobiernos de la provincia en el que los
'populares' podrían gobernar con el apoyo de C's" a cambio de ostentar
la vara de mando de la capital.

Ahora
mismo este embrollo en el que se encuentra enredado el cabeza de lista
de la formación naranja está propiciando muchas conjeturas y
especulaciones. Éstas hablan de que el líder de Ciudadanos Málaga está
actuando unilateralmente. A tenor de lo ocurrido, aprender a medir los
tiempos y saber digerir adecuadamente los éxitos poselectorales no se
han puesto en práctica en Ciudadanos Málaga. Mientras tanto, la consigna
del silencio impera en la formación naranja. Este periódico ha
intentado contactar sin éxito con el 'número uno' de Málaga. Habrá que
esperar a las decisiones que se adopten este martes en el comité
nacional de pactos, que presidirá Albert Rivera.

Este
periódico ha intentado durante todo el día hablar con Cassá, que ha
mantenido un silencio tan sólo roto por un tuit desde su cuenta
personal: "Repito una vez más, no hemos venido a la política a
intercambiar sillones sino a cambiar las instituciones desde dentro con
responsabilidad".