La caída de Aguirre o su salida del PP, cada día más cerca por el acoso de Ciudadanos

En una entrevista en la Cadena SER, Rivera ha explicado que las dimisiones eran una "condición de sentido común" únicamente para "sentarse a hablar" con el PP o con cualquier otro partido, ya que para Ciudadanos es "condición sine qua non" que ningún consejero, director general o diputado autonómico esté vinculado a ningún caso de corrupción que pudiera "poner bajo sospecha" a la institución en la que presta servicio.

"En ese caso creemos mejor dejar el cargo y defenderse en primera instancia. Es lo que planteamos y sirve para todos", ha hecho hincapié Rivera, matizando no obstante que a quienes no les gusten estas condiciones no tienen por qué pactar con Ciudadanos. "No es obligatorio llegar a acuerdos con nosotros, pero si nos piden apoyo queremos hacerlo de forma correcta. Si no se llega a acuerdos con nosotros no pasa nada, no es obligatorio llegar a acuerdos con nosotros, pero tampoco es obligatorio gobernar", ha advertido.

El líder de la formación naranja ha explicado a renglón seguido que, una vez superado el punto de partida de que no haya imputados por corrupción entre los cargos electos, el partido que reclame su respaldo para una investidura en cualquier institución deberá también pactar otras condiciones, como el fin de los aforamientos en los tribunales superiores de Justicia autonómicos o las listas abiertas en las elecciones regionales.

No obstante, el político catalán también ha recordado que después de llegar a acuerdos hace falta ser capaz de cumplir los pactos. "Y me preocupa que Cifuentes pueda llegar a hacer cumplir los acuerdos a los que llegue con nuestro equipo", ha reconocido, al ser preguntado si se preguntará cómodo pactando con el partido que preside Esperanza Aguirre.

Aguirre, por cierto, lleva desaparecida más de una semana, tiempo en el que no ha comentado nada sobre pactos del PP de Madrid ni sobre su futuro político.