Aunque Federico Quevedo trataba de restar dramatismo a la alianza de los socialistas con Compromís, en El Cascabel Edurne Uriarte e Isabel San Sebastián anunciaban poco menos que el apocalipsis a los valencianos por culpa de un PSOE que se ha echado en manos del “radicalismo”. Por pura casualidad, el plano de cámara mostraba en ese momento a Ricardo Martín, claramente en contra de lo que escuchaba, mirando al techo con cara de resignación.
Claro que si la retahíla de datos que aportó Carlos Cuesta sobre las perspectivas económicas de la comunidad valenciana, quizá las vehemente tertulianas de Antonio Jiménez no anden muy descaminadas.
En La Noche de Sergio Martín la norma es el repaso de la actualidad y como es lógico abrió con la noticia del día, la investidura –82 días después de que hablaran las urnas- de Susana Díaz. Meritxel Batet, secretaria de Estudios y Programas del PSOE, fue la invitada de los jueves. Una de las caras de la renovación impulsada por Pedro Sánchez que no ocultó la satisfacción en las filas socialistas por el desarrollo de los pactos. Negó que se haya dado “un cheque en blanco” a Manuela Carmena, pero criticó la formas con el candidato socialista, Antonio Miguel Carmona.
Al respecto, Manuel Cerdán le preguntó si no temen al “día a día” con una formación como Ahora Madrid y si cree que estos pactos durarán más allá de enero, tras las Generales. Batet admitió que se abre un periodo de “incertidumbre” –palabra que usó en varias ocasiones- y esquivo la cuestión sin mojarse.
Antonio Casado quería saber hasta dónde llegan las voces críticas dentro del PSOE que se oponen a los pactos con Podemos [casi al mismo tiempo, precisamente Tomás Gómez intervenía en El Cascabel]. La socialista respondió preguntando a su vez dónde está el radicalismo y el populismo, “si en Manuela Carmena o en Esperanza Aguirre”. Desde luego, apoyar a la dirigente popular “no era una opción”, concluyó Meritxel Batet.