My Retrobox: cápsulas del tiempo que guardan los mejores recuerdos

My RetroBox son cajas de recuerdos personalizables que permiten a un bebé guardar para siempre las experiencias clave de su vida o a una pareja las emociones que vivirán el día de su boda. Internet ha transformado todo en efímero, y esta pareja zaragozana ha decidido que los recuerdos deben perdurar como siempre lo han hecho: en formato papel.

Hablamos con los dos creadores del proyecto, que nos cuentan todos los secretos para hacer de una ilusión, una empresa.

¿A qué os dedicabais cuando decidisteis lanzar MyRetroBox?

María: Daniel es diseñador gráfico y web y yo soy arquitecta. En el momento de crear MyRetrobox los dos teníamos nuestra actividad como profesionales independientes. Nuestra condición de trabajadores autónomos nos hizo pensar en la posibilidad de crear un proyecto paralelo, que generara ingresos extra y que justificara un poco más el pago de la cuota de autónomos.

¿Cómo surgió la idea?

Daniel: Estuvimos meses dándole vueltas a algunas opciones, pero finalmente, una noche de octubre de 2012, en casa tras una cena, nos propusimos llegar a una idea firme. Queríamos algo que supiéramos desarrollar nosotros mismos, que pudiéramos hacer desde casa y así compatibilizar con nuestras profesiones. No queríamos copiar nada, sino desarrollar algo nuevo y original. Y sobre todo, veíamos vital que fuera un proyecto que nos emocionara.

Con todas estas premisas, y tras muchas horas de brainstorming, dimos con el concepto “cápsula del tiempo para bebés”. Ese día nos fuimos a dormir únicamente con esa idea en la cabeza pero con la convicción de que habíamos dado, por fin, con una idea potente. Durante 6 meses dimos forma a la idea, diseñamos el producto, buscamos proveedores… Hasta que finalmente, MyRetrobox se convirtió en una realidad y la primera versión de la Baby Retrobox vio la luz.

¿Cuál fue vuestra vía de financiación para emprender el proyecto?

M: La financiación para este proyecto fue únicamente mediante recursos propios.

¿Qué es lo más complicado cuando montas una empresa?

D: La incertidumbre y las dudas que te asaltan constantemente al comenzar un negocio, y la cantidad de tiempo y esfuerzo que hay que invertir hasta que pasa de ser un proyecto a ser una realidad.

¿Os dijeron aquello de ‘estáis locos, cómo vais a montar una empresa con la que está cayendo’?

M: La verdad es que no, no nos lo dijo nadie. Tal vez porque ya trabajábamos como autónomos desde hacía unos años, o tal vez porque este proyecto nació como algo paralelo y no suponía mucho riesgo económico ni laboral para nosotros.

Las caras de extrañeza, eso sí, llegaban cuando les hablábamos de la idea en sí. El concepto “cápsulas del tiempo para bebés” era nuevo para todos y tardamos en aprender a explicarlo de forma clara; a la gente le costaba entender nuestro proyecto… Eso sí, una vez lo comprendían, la extrañeza se convertía en entusiasmo, lo que nos permitió ir comprobando el potencial que tenía nuestro proyecto.

¿Qué ventajas e incovenientes tiene ser tu propio jefe?

D: Para nosotros, las mayores ventajas son la libre disposición de nuestro tiempo, el poder organizar el trabajo como queremos, el poder tomar nuestras propias decisiones para el desarrollo de la empresa… y, sobre todo, la satisfacción personal que produce ver crecer un proyecto tuyo, que has sacado adelante de la nada.

Y como inconvenientes, el número de horas trabajadas (muchas veces hasta altas horas de la noche y casi todos los fines de semana…), la incertidumbre sobre el futuro y la constante duda sobre si las decisiones que tomas son las acertadas.

¿Cuál es vuestro valor añadido frente a la diversa competencia en regalos para bebés y bodas?

D: Nuestras cápsulas del tiempo son un producto nuevo, original, personalizado y emotivo. Con nuestras Retrobox damos la posibilidad de hacer un regalo diferente y personalizado. Es un producto muy completo que reúne en poco espacio diseño, actualidad, sentimientos, relaciones personales, emociones, recuerdos… Y además, es un producto que dura para toda la vida.

¿Qué tipos de MyRetroBox tenéis en el mercado actualmente?

M: Actualmente contamos con tres tipos de cápsula del tiempo:

- Baby Retrobox: Es una cápsula del tiempo que se regala hoy a un bebé (nacido entre 2012 y hoy mismo) pero que él no descubirá hasta que sea un adulto. Contiene información y curiosidades sobre el momento en el que llegó al mundo, así como imágenes y anécdotas de sus primeras hazañas.

- Peque Retrobox: Es una cápsula del tiempo que se regala hoy a un niño (nacido entre 2006 y 2011) en la que él, junto a sus familiares y amigos, congelará un trocito de su infancia para volverlo a encontrar cuando sea un adulto.

- Retrobox Sí Quiero: Es una cápsula del tiempo en la que una pareja puede guardar todos los recuerdos y emociones que vivirán el día de su boda para rememorarlos en el futuro, en el aniversario en el que decidar reabrir su cápsula.



* Retrobox Sí Quiero

¿Por qué regalar Retrobox?

D: ¡Son muchos los motivos por los que regalar una Retrobox! Es un regalo personalizado y emotivo, el diseño es original y único, porque apostamos por el consumo local y nacional (todos nuestros proveedores y fabricantes son españoles), porque una Retrobox perdura para siempre, se adaptan a todo tipo de familia que existen hoy en día… Además, en MyRetrobox nos implicamos. Comprando una Retrobox, colaboras con Make A Wish® Spain, cuya misión es provocar ilusión en niños y niñas que padecen enfermedades graves enriqueciendo sus vidas a través de experiencias personales de esperanza, fuerza y alegría.

¿Creéis que aún queda mucho que hacer en el sector de las celebraciones?

M: Sin duda, aún hay mucho por hacer. Es un sector muy trabajado, pero está en constante evolución y mejora. ¡No creemos en absoluto que todo esté inventado!

¿Por qué el éxito de todo lo ‘personalizable’ y que alude a lo emocional?

M: Hoy en día hay tantas opciones en el mercado que todos buscamos “algo más” cuando hemos de hacer una compra importante o un regalo para un bebé. La personalización convierte cualquier producto en único y especial. Y lo emocional, lo que toca la fibra, conquista en segundos al receptor del regalo. A fin y al cabo, estamos hechos de emociones.