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'Un príncipe para 3 princesas': Intercambio de reinos y princesas, las primeras 'cobras' y una amistad 'rota'

'Un príncipe para 3 princesas': Intercambio de reinos y princesas, las primeras 'cobras' y una amistad 'rota'

martes 02 de febrero de 2016, 09:46h

La Villa de las Princesas no conoce la paz, y es que la búsqueda del amor se ha convertido en una ardua competición, en la que hasta se intercambian los reinos, y con ello los pretendientes y las identidades. Un par de ‘cambios’ de princesa y una ‘ruptura’ entre Yiya y su asesora Marta después, los equipos de Yiya, Marta y Rym se quedan con 4 aspirantes, con las últimas calabazas a Dani, Fidel y Ramiro, respectivamente.

Cuando Luján Argüelles les anunció a las princesas que intercambiarían sus reinos durante unos días, a éstas no les hizo ninguna gracia, al principio. Como Marta tonteaba desde el principio con Ramiro, el argentino vasco del ‘equipo Rym’, fue ella quien ocupó el reino de la princesa oriental. Yiya, que en su faceta ‘revienta vidas’ hizo creer a Marta que dos de sus chicos se irían con ella, si quisiera, se instaló en el reino de la princesa ‘tradicional’, y Rym se trasladó al de Yiya.

Aunque a las princesas no les sentó bien la idea del cambio de reino, cuando Josh Wang ,el chino madrileño, abrió el buzón real y les reveló a sus compañeros el intercambio de reinos, ellos, lejos de parecer disgustados, se mostraron encantados con la idea, aunque no todos, ya que Juan Carlos y Borja prefieren a ‘su’ Yiya y Alfredo considera que pierde el tiempo al no ver a su princesa oriental.

- Cambio de reino y de 'vida'

El cambio de reino supuso una transformación total para las princesas. Marta se vistió e intentó vivir la vida de Rym, Rym hizo lo propio con Yiya, y ésta con la princesa rubia. Además, el cambio de reino implicó a los asesores y al vestuario.

A Pedro no le gustó nada recibir a Marta, mientras que Nuria se alegró de tener lejos a su amiga para conocer a Rym. La tía Chari, aceptó sonriente el cambio y aseguró que ayudaría a Yiya en todo lo posible. Yiya le cuenta a la tía Chari su problema con Nuria, de quien dice desconfiar pese a ser su amiga ya que cree que no es leal.

Los chicos iniciaron su propia mudanza dentro del cortijo, y el intercambio de habitaciones dejó algún momento extraño, con los chicos aferrándose a la foto de su princesa mientras algunos se alegraban del cambio.

En la primera cita de Marta con los chicos de Rym, Ramiro no dejó escapar ni un momento para pedirle una cita a la princesa. El argentino vasco pareció decantarse finalmente por Marta, sin cerrar del todo la puerta a Rym, y se decantó tanto que al intentar besarla fue víctima de la que llamó ‘cobra lateral’. Según Ramiro, la ‘cobra lateral’ “te permite volver”,y volvió a intentar besar sin mucho éxito a Marta, que tampoco se alejaba de él. David, el navarro, aprovechó para grabar en vídeo la cita para enseñársela a Pedro y luego a Rym. Como buen amigo, Pedro interrumpió la cita de Marta con el pretendiente de Rym, y se llevó a la chica de la cita.

Rym, a quien no le gustaban ni los pretendientes ni el estilo de Yiya, les comenta a los chicos que ella es más “hippie-chic”, y Dani, el ‘beatle’ aprovecha el momento para ‘dedicarle’ el primer piropo a Rym para llamar su atención. Al principio de su cita con los conquistadores de Yiya, Borja tuvo un ‘lapsus’ y llamó Yiya a Rym, y de paso, le preguntó si le gustaba Dani, aunque ella esquivó la pregunta. Pese a eso, Dani intentó conseguir una cita a solas pero Rym prefirió pedirle una cita a César, el jugador de rugby ‘cristianito’, con lo que el ‘beatle’ se quedó triste. Rym sorprendió diciendo que Borja era el que más le gustaba de los pretendientes de Yiya, y éste ‘se vino arriba’. Tras un tonteo con más risas que palabras, decidieron dar por terminada su cita y regresar con el resto.

Dani, con ‘más moral que el Alcoyano’, volvió a pedirle una cita a Rym y se la llevó a un escenario en la plaza del pueblo, y ante la mirada de los chicos de Yiya y Nuria. Dani se declaró a Rym y se intentó ‘arrancar’ por Kurt Cobain. Rym le agradeció la canción pero le insinuó que no le gustaba, aunque éste siguió deshaciéndose en halagos con la princesa e intentó besarla, consiguiendo la segunda cobra ‘real’ del día.

Yiya intentó ser tan dulce como Marta pero no tuvo mucho éxito, ya que en seguida, salió su estilo personal ‘a flote’. Nacho, el ‘happy flower’ que tuvo dudas en un primer momento entre Marta y la princesa morena, se dio cuenta de que quiere a ‘su’ Marta “más que nunca”. En lo que fue el karaoke más extraño del mundo, un de intento de cantar con una especie de ‘beatbox’ de fondo, Lucas aprovechó para dedicarle el tema, por llamarlo de alguna manera, a ‘su’ Marta, ‘ayudado’ por el árbitro Padilla.

- Ruptura entre Yiya y Nuria

Al final del día, las princesas se reunieron para contarse sus días, aunque no terminaron de informar de todo, en especial Marta, que fue ambigua sobre su cita con Ramiro. De repente llegó Nuria, que aseguró que volvía de una cita con Juan Carlos, pretendiente de Yiya, con lo que ésta estalló.

Yiya la acusó de no ser “leal” y le dijo que había decidido ‘prescindir’ de ella como asesora y amiga, y tras esto se marchó enfadada a su habitación.

Rym y Marta se mostraron sorprendidas con la reacción de Yiya porque decían no saber los motivos de su enfado con Nuria, algo que tampoco sabía la propia Nuria, según aseguró. La asesora intentó hablar con su amiga, pero ella se negó en rotundo.

- Hasta los premios tienen trampa…

Al día siguiente, las princesas, que debían seguir con su intercambio de reinos, tuvieron como ‘premio’ una cita con uno de sus conquistadores, y como era de esperar, eligieron a sus favoritos, Borja (Yiya), Padilla (Marta), y Diego (Rym). La ‘pega’ de su premio era cada una elegiría la cita de otra.

Marta le eligió a Rym una cita en un restaurante en el que tenía que cocinar, algo que a ella no le hizo mucha gracia hasta que llegó su amado bombero pirómano. Cuando apareció Diego, la princesa se olvidó del mundo y decidió cocinar con su chico, terminando liados entre los fogones. Y es que, pese a la falta de iniciativa de Diego, Rym optó por ‘lanzarse’ y se fundieron en un pasional beso que terminó de enamorar a la princesa. Y como en el estilo ‘a lo Rym’ sobran las palabras, terminaron su encuentro con otro beso.

Yiya ‘envió’ a Marta y Padilla a un vertedero, e ironías de la vida la cita resultó ser una ‘mierda’. Padilla era el favorito de Marta, por el que ella ‘bebía los vientos’, pero cuando tuvo ocasión de pasar un rato a solas con él, se llevó una gran desilusión. Padilla, que padeció enmudecer con la presencia de Marta, fue ‘víctima’ de un choque contra una señal de tráfico vertical. A pesar de que Marta comenzó confesando que le había elegido porque le gustaba más que los demás, cuando le pidió que le contara algo sobre él, Padilla se quedó en silencio. Marta intentó buscar la conversación pero él parecía estar en ‘otro mundo’. Un silencio incómodo se apoderó de la cita hasta la llegada de una avispa, que les hizo levantarse para poner fin a su encuentro. En el camino de vuelta y, como el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra, Padilla volvió a chocarse con la señal de tráfico.

Rym ‘envió’ a Yiya al campo a recoger mangos en tacones, pero pese a alguna mala pasada del calzado, el plan fue perfecto para la princesa por la presencia de su querido Borja, al que le contó su enfado con Nuria, pero sus males se pasaron pronto, cuando su amado le preparó un pic-nic. Ambos se mostraron encantados de estar juntos, y entre juegos con pinturas, aprovecharon para acercarse más.

Muy a pesar de Rym y Yiya, las citas terminaron y llegó el momento de regresar al reino, donde se contaron sus citas. La princesa oriental y la ‘revienta vidas’ manifestaron con palabras y gestos lo felices que estaban, mientras que Marta les confesó su desilusión con Padilla.

- Fin al intercambio

El buzón real interrumpió una ‘clase’ de yoga, y anunció a las princesas el fin del intercambio de reinos, con el que se muestran encantadas, salvo Yiya, que recuerda que tendrá que volver a ver a Nuria, a la que no considera amiga ni asesora.

En su reencuentro, Pedro le contó a Rym que Marta y Ramiro tuvieron una cita a solas y que él tuvo que interrumpirles porque estaban muy acaramelados, cosa que hizo que Rym rechazara al argentino.

Yiya se reunió con Nuria, que tendría que seguir siendo su asesora pese a la incómoda situación entre ambas. Nuria se mostró convencida de que no había hecho nada malo aunque Yiya creyó que sí y se marchó de nuevo. Al final, Nuria terminó mudándose al cortijo donde viven los pretendientes para poder seguir siendo asesora pero sin compartir habitación con la que era su amiga.

Marta y su tía Chari, encantadas de volver a estar juntos, se pusieron al día, y la princesa le reveló su desilusión con Padilla y cree que se aburriría de él “a los dos días”.

Las princesas pudieron tener un encuentro con sus pretendientes, y aprovecharon para saber qué había ocurrido en los intercambios.

Rym cocinó arroz a la cubana, uno de sus platos favoritos, a su chicos, y aunque se olvidó en un lapsus de Alfredo, éste se sumó a la comida. Los chicos quisieron saber cómo había ido su cita con Diego, pero Rym no les contó casi nada. La princesa se levanta para coger una botella de vino de la cocina y David, fue detrás de ella para enseñarle el vídeo que grabó con su móvil de la cita entre Ramiro y Marta, y de paso, intentó acercarse a ella.

Aunque todos se habían quitado la pulsera de Marta, Ramiro no lo había hecho, y Rym, irónica, le dijo que le quedaba mejor el color de Marta y que debería irse con ella.

Yiya y Nuria, que esperaban sin mediar palabra, recibieron a los chicos en un ‘chiringuito’ en la playa. Yiya, no tardó ni un segundo en poner a todos al día de su ‘no’ relación con Nuria. Dani le pidió un rato a solas para confesarle su amor por Rym, y Yiya, hasta se alegró por él, y le dejó ir “libre”.

Marta se reencontró con sus chicos, que esperaban saber qué pasó en la cita con Ramiro pero ella se limitó a decir que había “ido bien”. ‘Milagrosamente’, Padilla recuperó el habla para manifestar su malestar con Ramiro por querer conquistar a su amada, pero ella no le hizo caso alguno, y se fue de paseo con Mateo, con quien ‘conectó’ desde el primer momento. Cuando estaban más cariñosos apareció Nacho, el ‘happy-flower’, para conseguir un rato con Marta, en el que le pidió bailar juntos, en la calle y sin música.

Luján llegó con las temidas calabazas. Yiya, a quien le gusta la gente libre, le dio la calabaza a Dani junto con la oportunidad de conocer a Rym, pero a ella no le gusta, así que ‘el beatle’ se queda sin princesa.

Rym entregó la calabaza a Ramiro por su traición con Marta, y éste se alegró al pensar que podría convertirse en el pretendiente de la princesa ‘tradicional’. El argentino vasco se apresuró y besó a Marta, aunque ellos no sabían que Luján no le dejaría quedarse, ya que quien tiene una calabaza debe abandonar el reino.

Marta se mostró dispuesta a irse con Ramiro y dejar el reino pero, habrá que esperar al próximo capítulo del ‘cuento’ para saber qué sucede.

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