El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha asegurado que están más cerca de cerrar un pacto con el PSOE. Sin embargo, Ciudadanos ha querido ser flexible con los tiempos y ha retrasado el límite para decidir si hay acuerdo global o no hasta este jueves. El gran escollo que queda todavía pendiente es la reforma constitucional que el partido naranja quiere para introducir medidas de regeneración. En este sentido, Rivera ha señalado que hay reticencias por parte de los socialistas en medidas como la supresión de las diputaciones o la despolitización de la justicia.
Mañana de nervios y de expectativas en el Congreso de los Diputados ante la comparecencia de Albert Rivera. Los contactos entre PSOE y Ciudadanos han continuado de forma ininterrumpida y ya se han alcanzado avances en casi todos los puntos.
De hecho, el líder de Ciudadanos se ha mostrado bastante optimista sobre la posibilidad de cerra pronto un acuerdo y ha dado un nuevo plazo al PSOE para resolver los últimos flecos. "Estamos cerca de alcanzar un acuerdo con el PSOE, no lo alcanzamos todavía porque hay escollos importantes", ha reconocido Rivera, que ha dado otras 48 horas a los socialistas.
El líder de la formación naranja ha explicado que el principal obstáculo ahora está en la "reforma constitucional exprés" que proponen para intoducir en la Carta Magna medidas de regeneración democrática. En este punto, según ha comentado Rivera, continúa habiendo "reticencias" por parte de los socialistas.
En concreto, lo que Ciudadanos quiere incluir en la Consitución es la supresión de la figura del aforado, la reducción de firmas necesarias para tramitar una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) de las 500.000 a las 250.000, la despolitización de la justicia, la eliminación de las diputaciones y la limitación del mandato del presidente del Gobierno en 8 años.
En este bloque, Ciudadano ha cedido en una de sus medidas estrella: la eliminación del Senado. Según ha defendido Rivera este martes, ahora se conforman con que haya un debate "con más tiempo" para consensuar si hay que modificar la Cámara Alta.
Rivera ha dejado claro que los socialistas tienen que aceptar estos cinco puntos para poder cerrar el acuerdo, ya que ha defendido que son condición "sine qua non" para firmar el pacto global.
Por otra parte, Rivera ha evitado detallar los avances que se han producido en materia de política económica y fiscal, a pesar de que Ciudadanos había reconocido discrepancias en temas como el de la reforma laboral o los impuestos. El dirigente ha reconocido que todavía hay "pequeños escollos" en estos temas, pero no ha definido estos obstáculos como decisivos para el éxito o el fracaso de la negociación.
¿Sí o abstención?
Rivera ha explicado que su postura sigue siendo, en principio, la de abstenerse en la investidura de Sánchez pero ha dejado la puerta abierta a otras opciones, como la de votar sí. En el caso de Ciudadanos no será una consulta a las bases sino la ejecutiva del partido quien tenga la última palabra para decidir el voto de la formación naranja.
Todavía queda pendiente la discrepancia sobre quién se debería sumar al posible acuerdo entre socialistas y Ciudadanos, ya que juntos no llegan a la mayoría. Rivera ha reiterado que ellos quieren contar también con el apoyo del PP, ya que es la única manera de conseguir la mayoría reforzada necesaria para cambiar la Constitución y porque, segun él, no se pueden ignorar los 7 millones de votos que tuvo la formación de Mariano Rajoy.
Precisamente, el presidente de Ciudadanos ha anunciado que este martes por la tarde habrá una reunión entre represetantes de la formación naranja y del PP para marcar la metodología que debe seguir el diálogo entre estas dos fuerzas.
Rivera ha dejado claro además que el documento que están negociando con los socialistas debe marcar el "núcleo duro" de la legislatura y que, por tanto, considera que no sería compatible con las exigencias que está haciendo Podemos, que sería el otro socio al que está mirando el PSOE.
El portavoz del grupo socialista, Antonio Hernando, confirmó este lunes por la noche que ellos mantenían su voluntad de mirar tanto "a izquierda como a derecha". Es decir, que buscarían un acuerdo que fuera compatible tanto con Podemos como con Ciudadanos, a pesar de que estas formaciones han señalado que esto es imposible.
Transparencia en las reuniones
Las expectativas ante la comparcencia de Rivera eran muy altas después de que se conociera que este lunes el líder de Ciudadanos mantuvo una reunión 'discreta' con Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados al mismo tiempo que se desarrollaba el encuentro a cuatro entre PSOE, Podemos, Compromís e Unidad Popular-IU.
Preguntado sobre la discreción del encuentro con Sánchez, Rivera ha contestado que la primera transición no se retransmitió por "streaming" y ha negado que el de este lunes fuese un encuentro secreto, ya que tuvo lugar en la Cámara Baja, precisamente donde están puestos todos los focos. "No nos fuimos a Hungría", ha comentado Rivera.
Además, el líder de Ciudadanos ha dicho que no se llegan a acuerdos "dando ruedas de prensa y pidiendo secretarias de Estado", en clara referencia a Podemos.
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