En una tajante comparecencia, Tejeiro ha aseverado que los trabajadores en cuestión ni trabajaban ni cobraban nómina de las entidades a pesar de haber sido dados de alta en la Seguridad Social, lo que permitía aumentar los gastos deducibles a Hacienda además de disminuir la base imponible y la cuota a pagar en el Impuesto de Sociedades.
Tejeiro ha declarado en la misma línea que ya lo hizo su hermano y el otro de los contables del Instituto, Marco Antonio Tejeiro.
-acusado por estos hechos-, al aseverar que mediante esta práctica tanto Urdangarin como Torres convertían los fondos de los contratos simulados en dinero negro.
Y ello puesto que el importe de las nóminas, al no abonarse a los presuntos destinatarios y sí contabilizarse como gasto, desaparecía del tráfico mercantil y acababa en manos de ambos acusados. De este modo, los responsables del Instituto Nóos ennegrecían así parte de los fondos públicos percibidos.
Tejeiro ha responsabilizado por igual a ambos exsocios, si bien ha manifestado que Torres, marido de su hermana Ana María Tejeiro, era quien "controlaba que todo cuadrase".
Infanta: "Nunca jamás. Ni siquiera la conozco"
"Nunca jamás. Ni siquiera la conozco". Así ha respondido Tejeiro durante su declaración por videoconferencia sobre si recibió alguna vez órdenes de la Infanta Cristina, desvinculándola de este modo de las actividades irregulares urdidas por Urdangarin y Torres.
El testigo se ha pronunciado en estos términos al ser interpelado por el letrado de la Infanta -acusada como cooperadora necesaria de dos delitos fiscales en el marco de esta causa- Pablo Molins, quien le ha inquirido sobre si la hermana del Rey Felipe VI le dio alguna instrucción en relación a facturas o en materia fiscal.
Asimismo, en relación al papel que ejercía su hermana Ana María Tejeiro, ha llegado a afirmar que "mi pobre hermana en este tema no tiene nada que ver. Ni pincha ni corta. Aguanta lo que aguanta".