Los individuos que la tarde de este domingo atracaron la tienda de Ikea Madrid Este, situada en el Ensanche de Vallecas, no dudaron en encañonar a un policía nacional y dispararle en varias ocasiones para poder escapar del lugar con el botín, tras robar antes varias cajas registradoras e intimidar con sus armas a varios trabajadores del establecimiento, según informaron fuentes de la Jefatura Superior de la Policía en Madrid.
El suceso ocurrió en torno a las 19.00 horas, cuando en el establecimiento estaba prácticamente lleno y se encontraban comprando más de 2.000 personas. Tras alunizar su vehículo, un Jeep Grand Cherokee de color negro, los asaltantes rompieron varias cajas registradoras y la caja principal con martillos de gran tamaño y robaron su contenido --cuyo importe se desconoce--, después de intimidar con pistolas a las cajeras y obligarlas a tirarse al suelo y robaron su contenido.
Minutos después, a las 19.20 horas, una unidad del Cuerpo Nacional de Policía, que se encontraba patrullando la zona, dentro de un dispositivo para evitar la sucesión de atracos que viene produciéndose en la zona del Ensanche de Vallecas, se acercó al centro comercial al escuchar gritos y al ser alertados por varios compradores.
Un agente se dirigió al coche empotrado contra el escaparate y entonces uno de los encapuchados le encañonó con una pistola. El policía realizó dos disparos al aire, y luego varios más, a pesar de seguir siendo intimidado por el arma del presunto ladrón, según fuentes policiales.
El delincuente se metió en el vehículo, que conducía otro hombre, y huyó al aparcamiento del centro comercial. Allí, otros tres o cuatro individuos subieron al vehículo y efectuaron varios disparos desde el cristal de atrás contra el agente. Asimismo, otros individuos, que supuestamente también habían participado en el atraco, escaparon en un coche BMW que tenían estacionado cerca del lugar, al parecer por la autovía A-3.
El tiroteo provocó escenas de nerviosismo y carreras entre los clientes. Un portavoz de Emergencias Madrid confirmó que recibieron un llamada, pero que no hubo heridos ni entre los agentes ni entre los compradores.
La Policía también afirmó que a las 23.00 horas una mujer denunció en la Comisaría de Villa de Vallecas el robo de su coche, el mismo que presuntamente utilizaron los delincuentes. El todoterreno, que está siendo investigado y al que se le había realizado un puente, fue localizado minutos después muy cerca del establecimiento de Ikea con la luna fracturada, el bombín forzado, varios impactos de bala y daños en la puerta delantera.
Normalidad y calma este lunes
Este lunes transcurrió con normalidad en la tienda Ikea del Ensanche de Vallecas. Los pocos clientes se mostraron "tranquilos" y algunos de ellos aseguraron no temer que vuelva a suceder un incidente de estas características. Otros, como un vendedor de cupones que estaba sentado a las puertas del establecimiento, señalaron que no es extraño que se produzca algo así, ya que "este nuevo barrio se encuentra todavía muy vacío" y son pocos los que hacen vida por sus calles.
En el interior del establecimiento era notable la presencia de seguridad privada. Cada pocos metros, junto a la cristalera rota, varios agentes de seguridad custodiaban la zona y estaban atentos a cada movimiento. En el interior, a las puertas de la tienda e incluso en la parada de Metro más cercana, "Las Suertes", se escuchaba hablar del atraco repetidamente.
No ocurre así con los propios trabajadores de Ikea que, al ser preguntados por el robo o por las reacciones de los clientes, no hicieron declaraciones y remitieron continuamente a la dirección de la empresa.
Si (
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