La banca virtual se abre paso a golpe de rentabilidad, a pesar de la caída progresiva que ha sufrido la remuneración de los plazos fijos y del último paquete de medidas del BCE.
Lejos quedan los depósitos al 4 % que hacían las delicias de los ahorradores más conservadores hace unos años. Según los últimos datos hechos públicos por el Banco de España, relativos al pasado mes de marzo, el tipo medio ponderado de los depósitos nacionales se situó en el 0,29 %. Un panorama desolador fruto de los continuos recortes que han practicado los bancos sobre este clásico del ahorro durante los últimos años, a raíz de la limitación de los extratipos impuesta por el regulador español en 2013.
La política monetaria de la eurozona también ha perjudicado considerablemente a los ahorradores patrios que hasta no hace mucho veían los depósitos como un refugio para sus ahorros. El último paquete de medidas establecido desde Fráncfort el pasado mes de febrero (reducción de los tipos oficiales al 0 % y aumento de la facilidad de depósito al menos 0,40) ha agravado la situación, señalan desde el comparador de depósitos a plazo fijo HelpMyCash.com. Ahora, los bancos pueden financiarse gratis acudiendo al BCE, gracias a los tipos al 0 %, y tienen que pagar una tasa negativa por dejar sus excedentes en el supervisor europeo.
El poder de la rentabilidad para ganar clientes
La banca sigue siendo consciente del poder que ejerce el tanto por ciento que acompaña a sus plazos fijos a la hora de seducir a nuevos clientes. Lo que ha provocado que, mientras la gran banca haya recortado sus rentabilidades hasta situarlas por debajo de la media, las entidades online y aquellas que buscan ganar cuota de mercado hayan apostado por ir a contracorriente y ofrecer tipos muy por encima de la media. Un oasis de rentabilidad en medio de un panorama de remuneraciones estériles.
Así, se pueden encontrar oportunidades como el Depósito Self al 3 % TAE de Self Bank con un plazo de tres meses disponible para imposiciones de hasta 15.000 euros -actualmente el depósito sin vinculación más rentable-. Le seguiría la Cuenta Bienvenida de Openbank al 2 % TAE durante tres meses contratable por cualquier importe que, si bien no es un depósito como tal, tiene un período inicial de alta rentabilidad equiparable al de los depósitos bienvenida, y el Depósito Naranja de ING Direct al 1,50 % a dos meses, disponible también por cualquier importe. Los tres tienen total disponibilidad, están orientados únicamente a nuevos clientes y pueden contratarse a través de Internet.
Depósitos a largo plazo para ahorrar sin prisas
Aquellos que prefieran ahorrar por un plazo de tiempo dilatado y que puedan prescindir de su dinero durante unos cuantos meses o, incluso, varios años encontrarán en la banca de origen extranjero a sus mejores aliados. Entidades como Banca Farmafactoring o Crédit Agricole Consumer Finance buscan hacerse un hueco en el mercado patrio a golpe de rentabilidad. Y parece que la táctica les funciona: la sucursal española de Banca Farmafactoring dobló el importe de los depósitos a la clientela en solo dos meses, pasando de atesorar 44 millones de euros al cierre de diciembre de 2015 a anotar algo más de 80 millones en el balance del pasado mes de febrero.
La entidad de origen italiano comercializa el llamado Depósito Facto con una rentabilidad de hasta el 2,10 % TAE. Ofrece al cliente la posibilidad de escoger el plazo que quiera (entre tres meses y cinco años), teniendo en cuenta que cuanto mayor sea la duración del contrato, mayor será la rentabilidad. El importe mínimo de cada imposición es de 10.000 euros. La entidad está adherida al fondo de garantía de depósitos italiano que, al igual que el español, cubre hasta 100.000 euros por titular. La única desventaja es que no podrá cancelarse anticipadamente.
En el caso de CA Consumer Finance, perteneciente al grupo francés Crédit Agricole, ofrece cuatro depósitos con plazos de seis, uno, dos y tres añosy rentabilidades de entre el 1,30 y el 1,80 %. El importe mínimo de contratación es de 5.000 euros y la cobertura la ofrece el FGD francés, con las mismas garantías que el español y el italiano.
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