A Rajoy ya sólo le queda el PSOE: nacionalistas vascos y catalanes no apoyarán su investidura

Pese a que se especuló y mucho con el apoyo de la antigua CDC, ahora Partit Demòcrata Català, PDC, las guerras judiciales que se abrirán en breve por la legalidad en Cataluña, tras la ofensiva parlamentaria catalana por la independencia, hacen prever que el pacto será imposible. Con varios dirigentes catalanes señalados por la Fiscalía en el proceso soberanista, pocas vías para un futuro de entendimiento se le abren a Rajoy con este partido, al igual que le ocurriría a Pedro Sánchez. Sus 8 escaños, por tanto, quedan descartados.

Recuperando esas cuentas, hay que recordar que el PP obtuvo en las elecciones de junio 137 escaños, que sumando, hipotéticamente, los 32 de Ciudadanos -habrá que verlo-, sólo suman 169. Aunque se especula con que Coalición Canaría sí podría terminar adheriéndose o al menos absteniéndose en segunda votación, faltarían algunos apoyos más para evitar una victoria abrumadora del 'no'. Dejen de buscar 'votantes': el PSOE tiene la clave. Sus 85 escaños son los que tienen la llave para el próximo gobierno, pese a que en Ferraz intentan desviar la atención a otros partidos, como sus otrora aliados de Ciudadanos.

A los 85 escaños del PSOE hay que sumarles los 71 de Unidos Podemos y los evidentes de ERC, otros 9, más los 2 de Bildu. Suman exactamente 167. Esto quiere decir que la mayoría del 'no' a Rajoy necesita que nacionalistas catalanes y vascos de centro-derecha, Convergència y PNV; se abstengan. Con eso ya salen las cuentas por tan sólo 2 votos. Pero todos caen en la cuenta que en otoño habrá elecciones vascas, como ya se encargó de recordarnos Iñigo Urkullu el pasado viernes, cuando confirmó el adelanto de la cita electoral. El PNV no se arriesgará a perder votos en los comicios de su territorio por apoyar a Rajoy, que para muchos es un cadáver político, aunque nadie quiera aún reconocerlo y aunque cuente con la 'nominación' del Rey para intentar formar gobierno.

No hay quien también ve la 'vida' (parlamentaria) de otra manera. Pese a que el PNV dice 'no' con todas sus letras, este partido tendrá problemas en otoño para continuar al frente de la presidencia vasca ya que amenaza con fuerza Podemos de Euskadi, que incluso podría sorprender buscando nuevos aliados, como la izquierda abertzale, si fuera necesario. De hecho, la elección de su candidata, Pilar Zabala, se ha interpretado como un claro gesto de este partido al electorado abertzale que intenta cerrar heridas del pasado y caminar hacia un futuro de legalidad e integración dentro de la familia democrática.

Si bien es cierto que, más allá de las especulaciones, la ejecutiva nacional del PNV acordó ayer domingo votar en contra de Rajoy si éste se presenta finalmente a la investidura y también descartaba participar en una hipotética abstención colectiva si el PSOE u otro partido así lo solicita.

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