El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha comenzado el mes de agosto con la incertidumbre de si se presentará o no a la investidura, y es que sabe que necesita el apoyo del PSOE, o al menos de algunos de sus diputados, para conseguir formar gobierno, y en Ferraz siguen insistiendo en el 'no'. Si Rajoy no consigue sumar los apoyos necesarios podría volver a decirle 'no' al rey Felipe VI cuando éste le proponga como candidato a presidente. Desde las elecciones del pasado 26-J, el PP ha lanzado la pelota al tejado de los socialistas, para que sean ellos quienes decidan si se repiten las elecciones. Para evitar ese escenario y sacar adelante, como sea, la investidura de Rajoy, el PP ha activado la maquinaria mediática para presionar al PSOE y a Ciudadanos. Según publica este martes el diario 'El Mundo', la Unión Europea podría sancionar con 6.100 millones de euros a España si no se forma gobierno antes de octubre.
'El Mundo' hace alusión a fuentes gubernamentales, que habrían asegurado que si no se alcanzan los pactos que permitan la formación de gobierno, España no podrá presentar un Presupuesto a Bruselas en la fecha fijada, el 15 de octubre. Según indica el diario, el Ejecutivo en funciones, que logró evitar la sanción por exceso de déficit el pasado 27 de julio, no podría esquivar esta nueva sanción.
El 15 de octubre, el Gobierno de España debe presentar un plan de Presupuestos de Ingresos y Gastos a Bruselas, que permita probar que se adoptarán las medidas que se comprometió a seguir para frenar la multa del pasado 27 de julio. Ese plan presupuestario debe basarse en el proyecto de Ley de Presupuestos de 2017, algo que sólo es posible si hay un Gobierno operativo en el mes de septiembre.
Según narra 'El Mundo', el Ejecutivo de Rajoy sostiene que si Sánchez y Rivera no permiten la investidura, "España no podrá acreditar ante Bruselas que va a tomar las medidas necesarias para cumplir la nueva senda de déficit, sobre todo para los 15.000 millones de ajuste que habrá que realizar en 2017". Si se mantiene esta situación de bloqueo, los procedimientos sancionadores europeos se endurecerían debido a la reincidencia en la falta de actuación contra el déficit excesivo.
El diario hace referencia a un "informe oficial gubernamental", que señala que España se expondría a "un amplio abanico de sanciones, en aplicación del artículo 126 apartado 11 del Tratado de la Unión Europea, que es el aplicable cuando un Estado no obedece una decisión previa como la adoptada el pasado 27 de julio por el equipo de Jean-Claude Juncker y refrendada con toda probabilidad esta semana por los ministros de Finanzas de la Unión Europea".
La sanción que logró evitarse ascendía a unos 2.000 millones de euros, mientras que la nueva sanción podría alcanzar los 5.000 millones, a los que se sumarían otros 1.100 millones de congelación de los fondos estructurales, por lo que la multa total rondaría los 6.100 millones de euros.
Según señala 'El Mundo', a estas sanciones que suman 6.100 millones, podría unirse, "según fuentes gubernamentales", "la posibilidad de una supervisión reforzada mediante misiones de la Comisión a las que se puede invitar al Banco Central Europeo". Esto supondría el 'regreso' de aquellos hombres de negro que verificarán, como hicieron en el momento del rescate bancario, si España toma medidas efectivas para reducir el déficit. Sin embargo, esas mismas fuentes, no creen que se aplique ese abanico de medidas sancionadoras a España, por los esfuerzos realizados desde 2012.
El PP está jugando sus cartas para presionar a las fuerzas constitucionalistas, PSOE y Ciudadanos, y lograr desbloquear una investidura, que por el momento, no cuenta con ningún respaldo. El Ejecutivo en funciones intenta también sumar apoyos internacionales que respalden el mensaje de la necesidad de formar un gobierno para alejar el fantasma de la incertidumbre económica.
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