La judoca española María Bernabéu lamentó su derrota en la pelea por el bronce "por no estar concentrada unos segundos" ante la alemana Laura Vargas Koch, en categoría -70 kg, donde no pudo poner fin a la sequía de 16 años del judo español en los Juegos Olímpicos.
"Me duele mucho, estaba en un gran momento, he peleado mucho. Al final por no estar concentrada unos segundos, duele mucho. Si hubiera sido como con la colombiana, que ha sido un 'ippon', hubiese sido distinto", indicó la salmantina ante la prensa.
Bernabéu rozó una medalla que se le escapó en la técnica de oro, después de dominar los 4 minutos del combate sin lograr mover el 0-0. "El judo es así, no te puedes relajar. Estoy contenta por mí, por mi entrenador, club, compañeros y familia. He luchado con el corazón, he dado el alma y al final no ha podido ser", afirmó.
La jornada comenzó bien para la española hasta que topó con la colombiana Yuri Alvear en cuartos de final. Pese a la contundente derrota, Bernabéu se enganchó a la pelea por la medalla en la repesca ante la israelí Linda Bolder. "Entre combate y combate escucho música, intento estar en mi burbuja, que no me partan la concentración", explicó sobre una intensa jornada.
"Cada combate es una final no puedes relajarte y en este combate último se ha visto. No es fácil, lo habéis visto. Entreno seis horas al día, viajo a Japón y llevo cuatro años sin vacaciones. Tenía la medalla en la cabeza, agradeceré el diploma pero tenía en mete la medalla", añadió.
La salmantina explicó que luchará "día a día" por llegar con opciones a Tokio 2020, donde espera que el judo rompa su sequía. "Hay mucha gente joven buena en el judo español. Mucha de la motivación que tenía ahí arriba era la gente del judo que me apoya y que quería esa medalla. Las ganas y la ilusión no nos faltan. A veces no nos lo creemos. No somos un deporte minoritario y nos falta corazón y mentalidad de campeón", finalizó.
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