La coach criticada por 'curar' la homosexualidad echa más leña al fuego: "Nunca he hablado de cura; sólo de ayuda para dejarla atrás"

En la entrevista, que la coach reproduce en su web, Lorenzo niega ser psicóloga y sostiene que es “coach profesional” que “apoya a personas con distinta orientación sexual que desean desarrollar su personalidad con la liberta propia de cada individuo”.

Sobre su supuesta cura a la homosexualidad, Lorenzo insiste en que “nunca” ha hablado de cura sino “ayuda para dejar atrás la homosexualidad”. “Es igual que decir que, si una persona que descubre su orientación homosexual y ‘sale del armario’, está dejando atrás la heterosexualidad en la que vivía”, manifiesta.

Según asegura, su terapia no supone un cambio en la orientación sexual. “Cambiar o no cambiar es una decisión libre y, con la debida explicación, la persona va optando por aquello que mejor concuerda con el ideal de personalidad que persigue. Algunos logran más avances que otros, como sucede en cualquier proceso personal. Tengo clientes que persisten en su orientación sexual, y trabajo con ellos en otros aspectos del coaching (desarrollo profesional, relación de pareja…). Otros, cuando indagan en su propia vida, comienzan a detectar causas que los llevaron a una determinada orientación. Al no estar de acuerdo con ello, deciden optar libremente por otra orientación. Yo no puedo dejar de apoyarlos”.

Lorenzo critica la nueva Ley de protección integral contra la LGTBIfobia, que entró en vigor el pasado 11 de agosto. “Lo curioso de todo esto es que esta ley apoya sólo a aquellos que sí aceptan su propia orientación. Pero si alguien desea cambiarla, la ley prohíbe prestarles apoyo. Me pregunto si este aspecto de la ley la hace igualitaria, por no decir otra cosa”.
Sobre los supuestos testimonios publicados en su página web, que han sido tachados de “falsos e irresponsables” por la organización Arcópoli, Lorenzo defiende que se trata de testimonios “reales”. “Decir que son irresponsables es como decir que hay ciudadanos de primera o de segunda categoría. En la primera estarían aquellos que concuerdan con sus ideas.

En la segunda categoría estarían relegados aquellos que han decidido optar por otra orientación sexual distinta de la homosexualidad. Yo no comparto esa postura; para mí todos son personas”.

“Una persona que desea cambiar de sexo, recibe tratamiento médico y apoyo psicológico. Pero si es alguien que desea cambiar su orientación sexual, se le niega el apoyo no sólo por las estructuras del Estado, sino que se impide que profesionales a nivel particular, como yo, puedan ofrecerles un apoyo. Y se impide con multas muy altas. ¿Es justo tratar así a estas personas?”, se cuestiona la coach.

En cuanto a quienes le han tildado de farsante y estafadora, Lorenzo asevera que se reserva el derecho de “acudir a la autoridad para denunciar civil y penalmente a quienes actuando de ese modo denigran la profesión de periodista. Y ellos hablan de farsa y de estafa. ¡Lo que hay que oír!”. Por último, la coach considera que el linchamiento que ha sufrido “en la calle y en los medios” se debe a que es mujer y no hombre. “Si fuera un hombre no me acosarían en la calle como lo están haciendo, así como en los medios. Pero la vulnerabilidad de la mujer se manifiesta en estos pequeños detalles”.

- La Asociación Arcópoli denuncia una página web que asegura técnicas de "curación de la homosexualidad"