Una de las consecuencias de la crisis económica que arrancó en 2008 es la disminución o ausencia de ofertas de empleo. Esta falta de empleo ha provocado también un descenso en la tasa de abandono escolar temprano (jóvenes que dejan de estudiar al terminar la ESO), aunque no en todas las familias, y es que en aquellos hogares con mayores dificultades económicas, el abandono escolar se ha disparado. Esta es una de las conclusiones del informe ‘Necesita mejorar’ elaborado por la ONG ‘Save The Chidren’, que indica que en las familias con menos recursos, la tasa de abandono escolar duplica la general.
Según este informe, "el origen socioeconómico es ahora más determinante" y advierte de que el 43% los niños del quintil más pobre de la población española (20%) abandona prematuramente sus estudios en 2015 frente al 20% de la tasa media española.
Según los datos oficiales, la tasa general de abandono escolar alcanzó su máximo en 2008 con el 31,9% y comenzó a bajar desde ese año hasta situarse por primera vez por debajo del 20% en 2015. Una reducción de once puntos porcentuales en siete años, que contrasta con el aumento de ocho puntos de la tasa de abandono de los jóvenes de las familias españolas más desfavorecidas: en 2008, era del 28% y en 2015 del 36%, tal y como indica este informe.
Si se tiene en cuenta a los jóvenes entre 18 y 24 años del 40% más pobre de la población, el abandono temprano llega al 68%. Esta organización subraya el coste y social y económico y cuantifica este último entre el 5,9 y el 10,7% del PIB.
El fracaso escolar y el abandono temprano son para ‘Save The Children’ "problemas de justicia social y de desvinculación educativa". Para hacer frente a esto, pide un pacto de Estado por la Educación y apunta que las políticas y programas dirigidos a promover el éxito escolar deben diseñarse desde la equidad educativa e intervenir de forma sistémica y preventiva y "no limitándose únicamente al rendimiento escolar del alumno".
Los recortes y la LOMCE han disminuido la equidad
‘Save The Children’ critica los "amplios recortes" en el presupuesto de Educación en los últimos años, que han incidido "especialmente" en los estudiantes en peor situación, de la misma forma que sucede con la actual ley educativa, la LOMCE, que puede conllevar un aumento de la "segregación educativa y de la rigidez del currículum y evaluación, dificultando la atención a la diversidad".
Los recortes en la inversión pública en Educación han provocado un aumento del gasto de las familias, que se ha incrementado casi un 30% entre 2008 y 2015, "intensificando" así el impacto que la capacidad económica de las familias tiene en el resultado educativo y las expectativas de los niños.
La ONG destaca la diferencia entre igualdad y equidad, ya que el primer concepto implica un trato en igualdad de condiciones, mientras que el segundo se refiere a un trato a cada uno según las necesidades que presenta, para salvar así las desigualdades de origen.
"Somos un sistema resultadista. Si un niño parte de -10 y llega a 2, será mejor que uno que parte de 5 y llega a 7. Pero el proceso, lo que hacemos con el niño, no importa", lamenta una directora de un colegio público madrileño, cuyo testimonio recoge este informe.
‘Save The Children’ ha recurrido al informe PISA 2012 para establecer un perfil de los alumnos con los que el sistema educativo fracasa. Según las conclusiones extraídas, el grueso de los niños que salen peor parados son varones, de menor renta y, en muchos casos, de minorías étnicas o de origen extranjero. En cualquier caso, más allá del sexo del alumno, se ha detectado que el nivel socioeconómico marca “mucho más” los resultados del alumno.
De estos datos se deduce que se ha producido un aumento de la inequidad en el sistema educativo, por lo que la ONG reclama un Pacto de Estado por la Educación, y señala 9 principios que debería tener cualquier sistema educativo para cumplir la premisa de no dejar a ningún niño atrás.
9 principios que debe tener cualquier sistema educativo equitativo:
- Un sistema plenamente financiado y rico en becas, que pase del 0,1% del PIB al 0,4% en 2020. "He llegado a retrasar visitas de mis hijos al dentista porque prefiero que tengan un libro en el pupitre y puedan estudiar en las mismas condiciones que sus amigos", dice una madre con hijos en Primaria.
- Profesorado de calidad y suficiente para trabajar en entornos vulnerables. Entre el curso 2009-2010 y 2013-2014, el alumnado en centros públicos aumentó un 7,09% y el profesorado se redujo en un 2,91%.
- Ampliar la educación de cero a tres años, especialmente la de los niños en situación más desfavorecida. "Sin plaza en la guardería, ¿cómo se busca trabajo? Si lo mejores que los niños vayan, debería haber plazas para todos", dice una madre.
- Ofertar actividades extraescolares de calidad para la infancia en situación de pobreza
- Acabar con la segregación del alumnado para evitar guetos
- Evitar la estratificación escolar en grupos e itinerarios desiguales en la etapa obligatoria
- Una educación postobligatoria de calidad
- Segundas oportunidades para quienes quieran volver
- Planes individualizados para atender la diversidad del alumnado
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