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Una conciliadora Susana Díaz se apunta al congreso de Sánchez pero no desvela si se presentará ni le cuestiona
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(Foto: EP)

Una conciliadora Susana Díaz se apunta al congreso de Sánchez pero no desvela si se presentará ni le cuestiona

> La baronesa andaluza intenta bajar la tensión con Ferraz con un discurso sin referencias a las dimisiones o la legitimidad del actual secretario general

> "Los socialistas andaluces nunca jamás querremos que gobierne la derecha" y se confiesa dolida por "lo de subalternos del PP"

Por V. M.
jueves 29 de septiembre de 2016, 17:58h

“Hemos llegado a un punto en el que todas las soluciones son malas”. La presidenta del PSOE andaluz, Susana Díaz, ha bajado el pistón de su enfrentamiento con la actual dirección del partido que, por lo que se deduce de sus propias palabras, o mejor de las que no ha dicho, sigue siéndolo. Su discurso en tono conciliador ante el Comité Director de los socialistas andaluces ha sido muy crítico con Pedro Sánchez -al que no ha mencionado-, acusado de “temeridad y oportunismo”, pero ni le ha pedido su renuncia ni se acordado de la gestora, ni del Comité Federal; en cambio, la baronesa sevillana se ha apuntado a la celebración de un Congreso, sin más detalles, en el que “votarán todos y cada uno de los militantes”. O sea, como Sánchez.

Al parecer, Susana Díaz tenía una buena razón. Mientras ella hablaba en Sevilla de “coser las brechas” abiertar, en Ferraz filtraban una vía de diálogo para recomponer puentes o, al menos, no romper más antes del Comité Federal del sábado. Entre las prioridades, frenar las convocatorias de militantes ante la sede que proliferan en las redes.

También empezaban a circular nombres de posibles mediadores entre ambas facciones: Patxi López y Ángel Gabilondo suenan como favoritos entre muchos otros.

[Según informa Europa Press, más de un centenar de militantes y simpatizantes del PSOE se han concentrado esta tarde frente a la sede del PSPV en Valencia para mostrar su apoyo al secretario general del partido a nivel nacional, Pedro Sánchez, y para defender la celebración de primarias en el seno de la formación, según han apuntado fuentes socialistas. Durante la concentración -que se produce tras la dimisión de 17 miembros críticos de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, entre los que se encuentra el secretario general del PSPV, Ximo Puig- los asistentes han mostrado banderas del PSOE, banderas republicanas y varias pancartas.]

Ha sido muy significativo que Díaz, con la estructura del partido en entredicho, y con Verónica Pérez, la persona que esta mañana se ha arrogado la “máxima autoridad” en el PSOE, y el ‘golpista’ Antonio Pradas, sentados muy cerca de ella, no haya hecho la menor referencia al asunto. Ni siquiera de lejos.

Susana Díaz ha sido muy crítica con la dirección del partido sin mencionar a Pedro Sánchez en ningún momento. Ha hablado en todo momento de “compañeros y compañeras” que han pecado de “temeridad y oportunismo” y de adoptar “posiciones impropias de una gran familia” como es el PSOE, en el que “ni hay bandos ni es una banda”.

La presidenta andaluza se ha quejado del continuo descenso del apoyo en las urnas, “cosechando derrota tras derrota” desde 2008, “cuanto teníamos 11 millones de votos”. “Ahora tenemos unos cinco”… una tendencia que le parece aún más preocupante cuando la pérdida ha continuado “incluso estando en la oposición” de un Gobierno acosado por los recortes y la corrupción.

Conclusión: “Si la gente no te vota es porque no confía en ti”.

Socialistas de derechas

Pero lo que parece que le ha dolido más a Díaz es la división entre “socialistas de derechas y de izquierdas”. Y especialmente la descalificación del propio Pedro Sánchez al definir como “subalternos del PP” a quienes defienden la abstención en una nueva investidura de Mariano Rajoy. “Los socialistas andaluces nunca jamás querremos que gobierne la derecha", una frase que parece llevar implícito el mismo ‘no’ al PP del líder del partido.

En su defensa ha recurrido a Felipe González, a Zapatero y ha hecho una mención especial al asturiano Javier Fernández -presunto presidente de la presunta gestora- para reivindicar que “todos los socialistas lo son hasta la médula”.

Ha llegado el momento, pues, de “un congreso en el que decidirán todos y cada uno de los militantes”, algo que como ha tenido que reconocer es ya un “derecho” de los más de 150.000 afiliados del PSOE.

No ha dado ni un detalle más, también significativo teniendo en cuanto los planes que ha anunciado esta mañana Sánchez: primarias el 23 de octubre y congreso a mediados de noviembre y, por supuesto, sin gestora. Díaz no ha hablado de fechas y ni siquiera ha dicho si se trata de un congreso ordinario o extraordinario.

Por supuesto, mucho menos ha aclarado si ella se presentaría o no a ese congreso. La única posible referencia es un ofrecimiento a “coser” las brechas tanto internas como internas que ha puesto al PSOE en una de las mayores crisis de su Historia.

Entre las razones de la crisis, Podemos, cuyos “fogonazos” han deslumbrado demasiado a muchos “compañeros” que han caído en la trampa de un “análisis simplista”. La socialista andaluza ha sido muy dura, sobre todo, con Sánchez -de nuevo sin nombrarlo- por no haber salido al paso de las “injerencias” del partido morado en Castilla-La Mancha, Extremadura y ayuntamientos como el de Órgiva (Granada), donde una moción censura ha desalojado al alcalde socialista “para poner a uno del PP”.

“Creen que pueden hacer con el PSOE lo que han hecho con IU”, ha sido su sentencia sobre Podemos.

- Sánchez insiste: primarias sin gestora, pero adelantando el congreso

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