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Moción de censura a Rajoy: el dilema que no lo es tanto en el posible futuro PSOE 'sanchista'
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(Foto: PSOE)

Moción de censura a Rajoy: el dilema que no lo es tanto en el posible futuro PSOE 'sanchista'

domingo 05 de marzo de 2017, 20:03h

Es el debate que en estos momentos se libra en la línea más alta de nuestra política nacional: ¿qué pasaría si finalmente Pedro Sánchez recupera el bastón de mando del PSOE? ¿Defenderá su 'no es no' ahora con una moción de censura a Rajoy? Realmente no es una cuestión matemática de sumar diputados: Sánchez no es ahora diputado, lo que es su primer handicap en este asunto. Pero el más problemático es que para echar a Rajoy de la Moncloa y crear una situación preeleectoral necesita de Ciudadanos para ese objetivo.

Y ahí comienza, como siempre, a enquistarse la situación: Ciudadanos no está contento del todo con el PP y su pacto que permitió la investidura. Eso es cierto. Pero para aprobar una moción de censura es consciente que debe aliarse con quienes no quiere ver ni en pintura: Unidos Podemos. Dicho de otra manera, entramos en otro bucle infinito porque es la misma situación que provocó que Sánchez no pudiera investirse tras las elecciones de diciembre de 2015 y que hizo acudir de nuevo a las urnas a millones de españoles, atónitos ante lo que estaba ocurriendo.

Ciudadanos sí estaría dispuesto a poner las cosas difíciles a Rajoy y obligarle a ceder más en sus exigencias de regeneración política, y para ello sí podría utilizar al PSOE como alianza fuerte que tumbe cualquier altanería del PP. Pero entonces Podemos sería en esta ocasión quien bloquearía cualquier pacto, ya que no quiere a los 'naranjas' de cerca.

Sánchez tiene mucho camino por delante y todo son complicaciones. Para empezar, ganar ante la militancia socialista es relativamente sencillo, sí, pero eso no le asegura tener el control absoluto del partido, como en parte ya ocurrió anteriormente. Si quiere manejar un partido unido y que olvide el pasado debe contar con el sector de Susana Díaz, que ve con malos ojos cualquier acercamiento a Podemos y que siempre apostará por Ciudadanos como compañero de bailer, como ocurre en Andalucía. El único frente común es luchar contra el hegemónico PP, pero eso no le basta a Sánchez, que ya dijo que su objetivo tras ser secretario general del PSOE de nuevo es alcanzar los cielos: Moncloa. Pero también dijo que en ese objetivo está la izquierda a su lado, por lo que acercándose a Podemos e IU tendrá difícil fraguar mayorías.

Es por todo este asunto que en estos últimos dos días se ha especulado tanto con los planes que tiene Sánchez para el PSOE. Desde algunos medios como 'Ok Diario' se aseguró que Sánchez ya prepara su plan para la moción de censura -pero no está claro quién sería el candidato que presentaría para la presidencia, requisito obligatorio para las mociones de este tipo-, pero otros digitales como 'eldiario.es' señalan a todo lo contrario: Sánchez descarta esta medida extrema aunque suponga casi 4 añlos de Rajoy más.

La razón es evidente: hay que presentar un candidato alternativo a la presidencia, y a nadie se le ocurriría presentar uno que no sea diputado, porque es la norma no escrita que se pacta siempre entre partidos. En el PSOE no habría nadie de la confianza de Sánchez como para que sea el presidente del Gobierno durante unos años, hasta que haya nuevas elecciones, o las adelante de forma 'fraudulenta' para favorecer a su partido en las urnas. Más inimaginable sería ver al PSOE proponiendo a alguien de Unidos Podemos, inevitablemente Pablo Iglesias, para ser el presidente de todos los españoles. Descarten, por la misma razón, que Albert Rivera se postulara para el cargo, ya que no obtendría ni un apoyo de la bancada de izquierdas.

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