Ya se ha conocido la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) sobre la consulta independentista del 9-N de 2014. Había una alta expectación por conocer en concreto la condena que pudiera sufrir Artur Mas, y el ex president catalán ha sido castigado con 2 años de inhabilitación en cargo público aunque ha quedado absuelto del cargo de prevaricación, que era más peligroso por sus consecuencias penales.
La sentencia del TSJC contraria a Artur Mas ha sido bastante suave en cuanto a penas, ya que el fiscal Emilio Sánchez Ulled solicitó hasta 10 años de inhabilitación para él. Por su parte, ha condenado a su ex vicepresidenta Joana Ortega a un año y 9 meses de inhabilitación para cargo público y la ex consellera de Enseñanza, Irene Rigau, sufrió una condena de un año y 6 meses de inhabilitación.
Sus condenas se deben a que el tribunal considera que cometieron un delito de desobediencia al convocar la consulta pese a las advertencias del Tribunal Constitucional. Mas tendrá que pagar, además, una multa de 36.500 euros.
Y como señalábamos al comienzo, el tribunal ha acordado sin embargo absolver a Mas del delito de prevaricación en la consulta, que era el más grave al que se enfrentaba. Ahora queda por conocer el fallo del Tribunal Supremo sobre Francesc Homs, quien en 2014 era conseller de Presidencia de Mas. Al ser diputado nacional está siendo juzgado por otro tribunal debido a su aforamiento. Se piden para él también los mismos cargos: inhabilitación y condena por prevaricación. El fiscal pide 9 años de inhabilitación para él.
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