Podemos ha hecho una demostración de fuerza con la concentración en favor de la moción de censura contra el PP, aunque no han logrado su objetivo de rebosar la Puerta del Sol. No obstante, el discurso del partido morado y sus aliados se ha basado en el triunfalismo por una moción de censura que, según han asegurado, ya han ganado en la calle. Pablo Iglesias y los principales portavoces de las confluencias han querido recuperar la épica de la campaña electoral para contraponer su proyecto de país con el de las élites de la corrupción. "No vamos a tener aliados en las élites económicas, queremos tenerlos en la sociedad civil que se organiza. Este país es mejor que su Parlamento y estamos señalando al futuro", ha apuntado Iglesias.
Unidos Podemos ha querido celebrar a lo grande su moción de censura contra Mariano Rajoy a nivel estatal y contra Cristina Cifuentes a nivel madrileño. La formación de Pablo Iglesias, Izquierda Unida (IU) y las confluencias buscaba el objetivo de abarrotar un lugar tan simbólico como la Puerta del Sol para empezar a ganar en la sociedad una moción de censura que ya saben fallida en el Congreso.
La fotografía aérea del centro de Madrid mostraba una multitudinaria concentración con más de dos tercios de la plaza llena, incluyendo partes de las calles aledañas, pero aún así han quedado huecos en la zona más alejada del escenario. Y eso a pesar de que Podemos había puesto su empeño en abarrotar el lugar, tanto que sólo entre militantes de la formación morada se habían organizado 52 autobuses desde otros territorios.
La formación morada ha interpretado el evento como un éxito y ha asegurado que se han concentrado casi 40.000 personas, contando con las que se han acumulado en las calles cercanas. Sin embargo, la delegación del Gobierno ha rebajado la cifra hasta las 6.000 personas dentro de la Puerta del Sol.
Dirigentes de Unidos Podemos como Pablo Iglesias, Irene Montero, Ramón Espinar, Xavier Domènech o Antón Gómez-Reino han trasladado al público un mensaje de triunfo pese a que ya reconocen que la moción no saldrá adelante.
La épica y la recuperación del discurso 'arriba-abajo' han sido elementos muy presentes en el discurso del líder de Podemos, que ha querido contraponer la España real contra una minoría que se dice patriótica pero que se entrega a la corrupción. "Las élites están atrincheradas, están escribiendo su epílogo", ha afirmado un Iglesias eufórico.
El secretario general de Podemos ha hecho un nuevo llamamiento a la sociedad civil y a los votantes descontentos de otros partidos para construir un proyecto de cambio porque, según el dirigente, la moción tiene que sobrepasar a Unidos Podemos.
Pero además ha querido intentar combatir la frustración que puede generar una moción de censura fallida reiterando en varias ocasiones que están señalando al futuro para responder a una España que no aguanta más corrupción.
"Basta de hablar"
El acto lo ha arrancado el secretario de organización de Podemos, Pablo Echenique, que ha asegurado que ya han ganado la moción de censura en la sociedad. "Los números del Parlamento no son los de la calle", ha manifestado.
Echenique ha señalado que la urgencia de la moción de censura se explica también porque, según él, el PP se ha gastado el dinero que ha robado en acudir "dopado" a las elecciones. Este mensaje, repetido por otros dirigentes de Podemos, ha llevado a la formación a cuestionar incluso el resultado electoral y a acusar de un "fraude democrático".
La portavoz de Podemos en el Congreso, Irene Montero, ha querido dar un toque feminista a la defensa sobre la moción de censura. Así, ha remarcado que esta moción será la primera que cuente con una mujer durante la defensa de la iniciativa, ya que el formato de debate permite intervenir a otros dos portavoces además el candidato y previsiblemente Montero será uno de ellos.
Por su parte, el coordinador federal de IU, Alberto Garzón, ha apuntado que van a luchar contra el PP no sólo por los casos de corrupción sino también por sus políticas neoliberales. "Basta ya de hablar, de pedir dimisiones, la moción es una forma de actuar", ha señalado.
En el mitin que ha sido el foco central de la concentración han participado, además de los dirigentes de Unidos Podemos, representantes de la sociedad civil como una publicista en paro, una espartana de 'Coca-Cola en lucha', una taxista, un estibador o un pescador gallego.
Un lugar simbólico
La formación de Iglesias había elegido de forma concienzuda la Puerta del Sol para el punto culminante de su campaña por la moción de censura. Se trata de un escenario muy simbólico porque allí se encuentra la sede del Gobierno de la Comunidad de Madrid, ahora en manos de Cristina Cifuentes, y porque fue el epicentro del movimiento 15M. Pero además, la Puerta del Sol fue el lugar donde se produjo la movilización más multitudinaria de Podemos: la Marcha del Cambio, celebrada en enero de 2015.
La manifestación ha contado también con la presencia del tramabús, que ha vuelto a la capital después de estar recorriendo Castilla-La Mancha. El vehículo contaba con las mismas caras que en su viaje inaugural, con la excepción de una pegatina de Cristina Cifuentes como invitada especial. Con este último viaje, el tramabús termina de circular de momento.
La concentración se produce el mismo día que la primera reunión del Consejo Ciudadano desde que se anunció la moción de censura. La formación morada ha reconocido que existen "enormes riesgos" al presentar una moción que ya se sabe que decaerá y ha analizado sus estrategias ante ese escenario.
Por la mañana, Iglesias ha señalado que tienen que "crear contradicciones" entre otros actores políticos -como el PSOE- para llevarlos a su terreno en un momento de tensión marcado por el enfrentamiento entre cambio y resistencia.
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