¿Calor? Bicis atractivas para enfrentar el verano

Durante los fines de semana, es muy frecuente ver por carreteras y montañas a pelotones de deportistas practicando su deporte favorito: el ciclismo. Todos siguen las mismas rutinas: parten en grupo desde algún lugar pactado, se desplazan al destino elegido, donde suelen obsequiarse con un buen almuerzo, y vuelven después al punto de origen. De esta manera, combinan deporte y ocio en una misma sesión de entrenamiento.

En verano, la práctica del ciclismo se extiende a la familia. Una imagen habitual en el inicio de vacaciones es ver unas bicicletas sobre la baca de un coche o bien ocupando la parte trasera de una caravana. Después, en los puntos de destino, nunca faltan las familias saliendo a pasear en grupo cuando llega el atardecer.

¿Por qué es tan popular el uso de la bicicleta?

Porque es un combinación perfecta de diversión y ejercicio físico y, además, permite disfrutar del aire libre. El ciclismo es uno de los deportes más completos que existen y una de las formas de entrenamiento favoritas de los españoles, junto con las especialidades de gimnasio (aeróbic, aero-latino, steps, etc.), el running y la natación.

Beneficios para la salud

• La bicicleta es un ejercicio cardiovascular que beneficia al corazón y que ayuda a reducir grasas. Se calcula que con una hora de ejercicio se pueden perder unas 500 calorías.
• La práctica regular del ciclismo tonifica la musculatura de las piernas, especialmente los cuádriceps y los isquiotibiales. Además, fortalece los músculos que sujetan la articulación de la rodilla.
• La zona lumbar también se tonifica con el uso de la bicicleta, lo que repercute positivamente en el resto de la espalda.
• Ir en bici ayuda a combatir el estrés y favorece el descanso. Además, como todo los ejercicios físicos, la práctica del ciclismo hace que se generen endorfinas, la conocida hormona de la felicidad.
• Los límites los pones tú: cuando cogemos una bicicleta, somos nosotros mismos quienes imponemos el ritmo y el nivel de exigencia en el ejercicio. Podemos realizar desde entrenamientos duros hasta carreras suaves, o simplemente paseos con el objetivo de disfrutar.

¿Cuánto gastarnos en una bicicleta?

La inversión en una bicicleta dependerá básicamente del uso que queramos darle, del terreno sobre el que vayamos a circular y del tamaño. No es lo mismo una bicicleta de montaña que una de carretera o de paseo. Tampoco es lo mismo utilizar la bicicleta de forma esporádica que practicar el ciclismo de manera habitual.

Las bicicletas profesionales de carretera, por poner un ejemplo, pueden alcanzar los 8.000 €, mientras que una mountain bike sencilla puede costar sobre los 150 o 200 €. Pero si somos principiantes, no disponemos de demasiado presupuesto, o bien estamos indecisos respecto al deporte que deseamos practicar, lo más recomendable es adquirir una bicicleta de segunda mano. En internet existen páginas especializadas en este tipo de mercado. En ellas podemos encontrar desde una mtb Conor de segunda mano hasta triciclos eléctricos de tres ruedas.

Una de las webs con mayor éxito en este sector es BKie, que dispone de una app donde los particulares explican las características de sus bicicletas en venta e insertan sus propias fotos. A través de un buscador, el cliente puede localizar la oferta deseada y más cercana a su domicilio.