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Subida de tarifas eléctricas: informe

· La subida de las tarifas eléctricas en España será del 2,8 por ciento para 21,7 millones de consumidores domésticos.
· Otros gobiernos del mundo se plantean un aumento o reestructuración de sus precios
· El modelo energético mundial depende en un 80% de los combustibles fósiles
· El carbón es el combustible fósil más abundante, con reservas para 164 años de producci

viernes 29 de diciembre de 2006, 10:38h
La subida de las tarifas eléctricas que hoy aprueba el Gobierno de José Luís Rodríguez Zapatero y que entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2007 no es una medida aislada; otros países  se están planteando sus precios de la energía para el consumo. El motivo es la dependencia del modelo energético mundial respecto de los combustibles fósiles, que representan en términos generales más del 80% de la energía primaria mundial.

El aumento de tarifas eléctricas que el Consejo de Ministros aprueba este viernes, 29 de diciembre, y que entrará en vigor el 1 de enero de 2007, no es una medida aislada del Ejecutivo español. Los de otras zonas del planeta, como Latinoamérica, están a punto de decidir un incremento en los precios de la energía para el consumo. Es el caso del gobierno argentino que preside Néstor Kitchner. También los hay que se debaten sobre la reestructuración de los precios energéticos, como el mexicano de Vicente Fox, que se enfrenta a una reciente polémica surgida en Baja California sobre la bajada -y no la subida- de dichas tarifas.

El motivo del aumento de los precios de la luz no es otro que ladependencia del modelo energético mundial respecto de los combustibles fósiles, que es mayor en la Unión Europea, donde España es uno de los países más dependientes. En concreto, los combustibles fósiles representan en términos generales más del 80% de la energía primaria mundial.

En los siguientes gráficos se pueden ver las reservas mundiales de petróleo, gas y carbón, respectivamente

Gráfico 1

(Fuente: UNIÓN FENOSA)




Gráfico 2

(Fuente: UNIÓN FENOSA) 

 
  
Gráfico 3

(Fuente: UNIÓN FENOSA)

 
 
La subida de tarifas y el consumo en España

La subida de las tarifas eléctricas en nuestro país supone para los consumidores en baja tensión (segmento al que están acogidos 21,7 millones de usuarios) un aumento entre el 2 y el 3,31 por ciento, en función de la potencia que tengan contratada. O lo que es lo mismo: una subida media del 2,8 por ciento para los consumidores domésticos.

Para el resto de usuarios, el aumento llegará al 5,52 por ciento como promedio, según el Real Decreto de tarifas eléctricas para 2007 aprobado en el Consejo de Ministros de hoy.

El consumo total de energía eléctrica, a lo largo del 2006, ha sido de 252.878 GWh; es decir, un 2,5% más que en el año 2005, según Red Eléctrica Española, que calcula el crecimiento de la demanda en un 3,6%. El día de mayor demanda histórica de electricidad en la península ha sido el pasado 20 de diciembre, con un consumo récord de 854 GWh.

En cuanto a la demanda instantánea, se batió el récord de verano cuando, tras varios días consecutivos de calor y máximos de demanda, el 17 de julio, a las 13.26h, se alcanzaron los 40.730 MW. El máximo histórico de demanda eléctrica sigue establecido en los 43.708 MW del 27 de enero del 2005. “Estos datos confirman el acercamiento progresivo entre los valores máximos de invierno y verano”, dice REE.


La potencia instalada aumenta más de 4.200 MW

La potencia instalada en el sistema peninsular ha aumentado 4.213 MW durante 2006, alcanzando un total de 78.290 MW, lo que supone un incremento del 5,7% respecto a la del año anterior.

La mayor parte de esta nueva potencia, 3.132 MW, proviene de la puesta en servicio de seis nuevas centrales de ciclo combinado y de los nuevos parques eólicos que aportan a la potencia instalada un total de1.210 MW. Hay que destacar el cierre de la central nuclear José Cabrera con la consiguiente pérdida de sus 160 MW.

Por lo que respecta a la estructura de producción, lo más destacado es la aportación de los ciclos combinados, que este año se ha elevado hasta el 24%, este incremento ha hecho que sea el gas natural la materia prima con más peso en la producción de electricidad a lo largo de este año, un 30%.

Este aumento de generación ha compensado la escasa generación hidroeléctrica de los nueve primeros meses, debido a la sequía. No obstante, las lluvias de los últimos tres meses del año han permitido aumentar las reservas de los embalses hasta el 61,6% de su capacidad total, 20 puntos más que en la misma época del año anterior.

En cuanto a la energía adquirida al régimen especial, ha cubierto un 19% de la demanda, de la que la mitad ha sido de origen eólico. El 8 de diciembre se alcanzó el récord de producción eólica, con una energía horaria de 8.010 MWh, a las 15 horas, y una media diaria de 159.291 MWh.

El informe de REE también habla de los “sistemas extrapeninsulares”, en los que la demanda de energía ascendió a 15.149 GWh, con un crecimiento del 4,1% respecto al año anterior. “Esta demanda se ha cubierto en un 52,4% con grupos de fuel, un 20,7% con las centrales de carbón, un 21,3% con ciclo combinado y un 5,6% con la energía procedente del régimen especial”.

Según REE, por tercer año consecutivo “el saldo de los intercambios internacionales ha resultado exportador con 3.303 GWh, un 146% superior al del 2005, debido fundamentalmente al incremento de las exportaciones a Marruecos y a la disminución del saldo importador con Francia”.

En cuanto a la red de transporte peninsular, “hay que recalcar el esfuerzo realizado en reforzar la red de transporte, que ha aumentado en el 2006 en 407 km de líneas, entre los que destacan 16 km de la segunda línea de interconexión con Marruecos. También han entrado en servicio 1.200 MVA de capacidad de transformación”.

En total, en los últimos cuatro años se han puesto en servicio más de 1.400 km de nuevas líneas.

 
Un 53% más consumo para 2030

Las autoridades europeas –y, con ellas, las españolas—están trabajando para cambiar la mencionada situación de dependencia energética respecto de los combustibles fósiles. De hecho, la UE tiende a un modelo mixto de producción y suministro, con participación creciente de fuentes de energía renovables y la energía nuclear.

 
Gráfico 4



(Fuente: La energía en la primera mitad del siglo XXI. Informe elaborado por Honorato López Isla, vicepresidente ejecutivo y consejero delegado de UNIÓN FENOSA, el 21 de noviembre de 2006).
 
 
Gráfico 5



(Fuente: La energía en la primera mitad del siglo XXI. Informe elaborado por Honorato López Isla, vicepresidente ejecutivo y consejero delegado de UNIÓN FENOSA, el 21 de noviembre de 2006).
 
Gráfico 6



(Fuente: La energía en la primera mitad del siglo XXI. Informe elaborado por Honorato López Isla, vicepresidente ejecutivo y consejero delegado de UNIÓN FENOSA, el 21 de noviembre de 2006).

A comienzos del pasado mes de noviembre, el comisario europeo de Energía, Andris Piebalgs, advirtió que la demanda mundial de energía acentuará la vulnerabilidad de los países a una severa interrupción del suministro, disparará los precios y aumentará la magnitud del cambio climático. Sin embargo, añadió que la nueva política europea energética se dirige precisamente a prevenir estos problemas, fruto del aumento de consumo de un 53% para 2030 vaticinado en las Previsiones de la Energía Mundial 2006, publicadas por la Agencia Internacional de Energía.

El informe, elaborado por la Agencia Internacional de Energía, advierte de que, con las tendencias actuales, la demanda de energía primaria habrá aumentado un 53% en el 2030, y las emisiones de dióxido de carbono lo harán en un 55%.

Además, este informe, que se presentó en París y Londres coincidiendo con la celebración en Nairobi (África) de la Conferencia Mundial sobre el Clima, subraya la necesidad de una política más fuerte y estricta a escala mundial en el campo de la energía.

Para ello, el texto establece un escenario político alternativo para demostrar que el futuro energético puede mejorarse si los gobiernos de todo el mundo aplican medidas ambiciosas de eficiencia y promoción de fuentes libres de carbón.

Si se llevara a cabo esto, la demanda global de energía podría reducirse en 2030 un 20%. Por otra parte, también señala el documento que con “simplemente una docena” de políticas específicas en países cruciales, incluidos los de la UE, podrían disminuir en un 40% las emisiones mundiales de dióxido de carbono.

 
2007: revisión de políticas energéticas y seguridad

A comienzos del año 2007 que está a punto de comenzar, la Comisión Europea presentará la primera revisión de la estrategia energética de la UE, que será la base en la que se fundamente la nueva política comunitaria de la materia.

Esta revisión propondrá metas a medio y largo plazo para el desarrollo de fuentes de energía renovables y limpias en la UE.

(Incluye: Fuentes y gestión de la demanda energética y Programas de apoyo)

 

Otra iniciativa importante es el establecimiento de una red de corresponsales que velará por la seguridad energética desde principios de año. La medida ha sido decidida el pasado 17 de diciembre. El Consejo Europeo aprobó la creación de esta red como instrumento importante para recopilar y elaborar información geopolítica y relativa a la energía. En esta misma línea, la red servirá como modo de alerta rápida para apoyar la estrategia global de la UE para garantizar la seguridad del suministro de energía.

La seguridad del suministro es lo que más preocupa a los líderes europeos, que han aprovechado la coyuntura para reafirmarse en la idea de que el desafío que la UE tiene por delante puede utilizare para impulsar su construcción, y que el riesgo de la dependencia exterior no es sólo un problema, sino que además representa una oportunidad. Para algunos, como es el caso del presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell, el del club comunitario es un problema de “descarbonificación”, que necesita una respuesta tecnológica que los Veinticinco están preparados para dar.

Por otro lado, para garantizar la existencia de recursos, los líderes europeos apuestan por la mejora de la cooperación con los grandes países productores, de tránsito y consumidores; la realización de un mercado interior de la energía interconectado, transparente y no discriminatorio, con normas armonizados; el desarrollo de la cooperación para hacer frente a situaciones de emergencia y el desarrollo de fuentes energéticas nacionales.

Sin embargo, han recordado que los puntos fundamentales de la política europea son la eficiencia energética y el ahorro de energía y los jefes de Estado y de Gobierno han aprovechado para hacer un llamamiento para que se identifiquen adopten rápidamente las medidas prioritarias dentro del plan de acción de la Comisión Europea.

En la primavera de 2007, el Consejo Europeo desarrollará las prioridades dentro del plan de energético general para Europa, que incluirá aspectos exteriores, mientras que se espera un estudio de Bruselas. También se debatirá, dada la necesidad de inversiones en energía, un enfoque integrado con miras a una política energética segura, respetuosa del medio ambiente y competitiva. Además, han anunciado que en el futuro los asuntos e energía y cambio climático serán debatidos periódicamente en las reuniones de jefes de Estado y de Gobierno.

 

El “carbón limpio” como posible solución

No obstante todo lo anterior –la “descarbonificación” de la que hablaba Josep Borrell en el Parlamento Europeo--, lo cierto es que la demanda mundial de carbón crecerá a una tasa anual del 1,8% entre 2004 y 2030, lo que permite prever que su participación en el mix global de energías primarias permanecerá en torno al 25%. Según la Agencia Internacional de la Energía, de este aumento, el 86% tendrá lugar en los países en desarrollo del continente asiático, sobre todo China e India.

Este incremento de la demanda de carbón dependerá de los progresos en tecnologías limpias de carbón y del impulso a políticas energéticas orientadas a aumentar la diversificación de fuentes y aprovisionamientos.

Las perspectivas actuales recogen que la generación de electricidad aumentará su participación en el consumo total de carbón hasta el 73% en el 2030, frente al 68% de 2004.

El carbón es el combustible fósil más abundante. Existen reservas equivalentes a 164 años de producción y en torno a la mitad se concentran en sólo tres países: EE.UU., Rusia y China. Existen otros países entre los que se encuentran Sudáfrica con importantes reservas adicionales.

 
Gráfico 7


(Fuente: UNIÓN FENOSA)
 

El carbón es un combustible básico en la generación de UNION FENOSA. De ahí que esta empresa haya lanzado su “Plan Carbón Limpio”, que pretende incorporar en las centrales térmicas de carbón tecnologías más eficientes de generación y con combustibles más limpios.

Para ello, esta compañía española está desarrollando en todas sus centrales de carbón mejoras para reducir las emisiones de SO2, NOx y partículas, con proyectos de desulfuración y desnitrificación. La empresa también ha puesto en marcha un programa para transformar la central térmica de Meirama (Galicia). El objetivo de este proyecto es que la central pueda utilizar carbón de importación, con muy bajo contenido de azufre y mejorar sus condiciones medioambientales.

El Plan incluye la gestión activa de una cartera de emplazamientos capaces de albergar una central térmica de nueva generación, con tecnología supercrítica. Esta tecnología logra un mayor rendimiento y reduce en más de un 20 por ciento las emisiones de agentes contaminantes.

UNION FENOSA lidera, junto con Endesa, un programa de investigación tecnológica denominado Cenit CO2 y promovido por el Ministerio de Industria. Este programa, pionero en iniciativas ambientales, pretende desarrollar tecnologías para la reducción, captura y almacenamiento del CO2.

En total, UNION FENOSA invertirá 260 millones de euros entre 2007 y 2011 para mejoras ambientales de sus centrales de carbón.

 
Gráficos: Fuente, Unión Fenosa
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