Lo dejó claro el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban: si el Gobierno de Rajoy responde de una manera "exacerbada" y rebasa determinadas líneas en Cataluña frente al referéndum, la relación entre su partido y el PP en materia presupuestaria se "complicaría". Una velada amenaza que en realidad sería una forma de solidarizarse con los nacionalistas catalanes y plantarse en sus anteriores apoyos a Madrid.
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, respondió que es "un error" mezclar los Presupuestos con Cataluña, pero es un nuevo condicionante que ya está oficialmente sobre la mesa y que muchos esperaban. Por eso se espera no recurrir al artículo 155 de la Constitución, el que suspendería la autonomía catalana, porque el PNV tomaría nota y el precedente supondría abrir un nuevo abismo entre Madrid y las regiones con reivindaciones históricas.
Esteban, al sincerarse, no dudó en afirmar lo siguiente: "Responder al tema de Cataluña rebasando determinadas líneas y niveles complicaría la relación que pudiéramos tener con el PP. Eso lo sabe todo el mundo y, para empezar, el Gobierno". El PNV, aunque también sumado al carro del derecho a decidir, ha renunciado en varias ocasiones a comenzar un proceso secesionista vía referéndum, como lleva años Cataluña impulsando.
El Gobierno del PP necesita de los vascos para aprobar cualquier ley que no cuente con el PSOE, ya que con el apoyo de Ciudadanos es insuficiente para tener una mayoría absoluta, 50+1, en el Congreso. Los 5 escaños del PNV se sumarían a los 137 del PP, los 32 de Ciudadanos, el escaño de Coalición Canaria y el escaño del dúctil Pedro Quevedo, adscrito al PSOE, pero proveniente del partido Nueva Canarias, alcanzando los 176, justos los necesarios.
Si (
No(
A favor (
En contra (
