Europa y África acuerdan combatir de inmediato el tráfico de personas que resucita la época de venta de esclavos

La V Cumbre Europa-África que reúne en Costa de Marfil a 110 delegaciones de 55 países africanos, 28 europeos y numerosos observadores de la ONU y otras organizaciones cerró su primera jornada con un acuerdo entre la Unión Europea, la Unión Africana y la ONU para formar un grupo conjunto de trabajo con el fin de actuar contra las mafias de tráfico de personas, especialmente en Libia. En un comunicado oficial se explicó que se actuará de acuerdo con el Gobierno libio y se intensificarán las tareas para "desmantelar los traficantes y las redes delictivas, y para ofrecer oportunidades de desarrollo y estabilidad a los países de origen y tránsito, abordando las causas fundamentales de la migración". Asimismo se "acelerará el retorno voluntario asistido y el reasentamiento de los necesitados de protección".

El presidente francés, Emmanuel Macron, convocó, en el marco de la Cumbre, una reunión urgente sobre Libia con diversos líderes europeos y africanos. Macron reclamó "una acción de protección inmediata y masiva a la población en peligro" en Libia, cuya situación calificó de "crimen contra la humanidad". Insistió en la "urgencia" de evacuar de Libia a quienes quieran ser evacuados, garantizar el respeto al derecho de asilo en Europa y la lucha contra los traficantes de personas y sus modos de financiación. "Es necesario que podamos perseguir y sancionar a los responsables de la trata, extendida en toda África", dijo y abogó por "actuar, no sólo denunciar".

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró en su intervención en la Cumbre que la "prioridad debe ser salvar vidas humanas" y que el retorno de migrantes "debe ser seguro, rápido y humanitario". Recordó que las operaciones marítimas de la UE han rescatado a casi 150.000 personas desde 2016 y recalcó que "las vidas se salvan también y, sobre todo, en tierra firme". Subrayó que "el crecimiento y las inversiones tienen importancia capital para crear oportunidades en los países de origen" que eviten "el drama que con desgraciada frecuencia conlleva la búsqueda desesperada de un futuro mejor". Por otro lado, incidió en la necesidad de reforzar la cooperación "para erradicar el perverso negocio de las bandas que trafican con personas" y "desarrollar cauces legales de migración que beneficien tanto a los países de origen como a los de destino y reduzcan los alicientes para recurrir a las mafias".