El Instituto de Estudios Económicos (IEE) considera que la incertidumbre económica derivada del proceso independentista tendrá un impacto "significativo" sobre el crecimiento de 2018, tanto para la economía catalana como para la del conjunto de España.
Según sus estimaciones, la economía catalana crecerá 5 décimas menos de lo que lo habría hecho sin las tensiones políticas, un 2,5%, lo que restará 2 décimas al avance del PIB nacional, que quedará en el 2,8%.
El presidente del IEE, José Luis Feito, aseguró que se ha producido "un proceso de deslocalización de la economía catalana" y advirtió de los riesgos de un triunfo de los soberanistas el 21-D, entre ellos la fuga de más empresas, que el menor crecimiento se haga estructural y la región pierda atractivo de forma permanente.
Por el contrario, si ganan los constitucionalistas "la situación podría normalizarse u suponer un espaldarazo al crecimiento", que alcanzaría el 3%, con una mejora de las expectativas y de la confianza de los agentes económicos.
Su pronóstico es que tras las elecciones "no se alcanzará una mayoría parlamentaria ni de los partidos independentistas ni de los constitucionalistas" y "si no se revierte la situación de incertidumbre, Cataluña acabará teniendo un crecimiento potencial inferior al que podría tener en una situación de completa estabilidad institucional".
Por su parte, el ministro de Economía, Luis de Guindos, aseguró ayer que Cataluña sufrirá una "desaceleración importante" en el cuatro trimestre debido a una caída "muy importante" de la inversión y el consumo, aunque se mostró convencido de que el procés se va a revertir y la economía "se va a recuperar".
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