Durante mucho tiempo se había venido especulando con que el astro argentino y estrella del Barça, Leo Messi, había retrasado al máximo su renovación con el club azulgrana para conocer el resultado de la crisis soberanista. Pretendía así, aconsejado por su entorno, que pudiera conocer el futuro que le esperaba deportivamente en caso de independencia de Cataluña. Meses después pero con el proceso aún abierto, Messi se habría blindado de una manera peculiar en su último contrato millonario.
Según ha revelado este viernes el diario 'El Mundo', Messi se preocupó por la hipotética independencia catalana y "obligó al Barcelona" a fijar nuevas condiciones específicas al respecto en la redacción del nuevo contrato, una vinculación millonaria que le permitirá ser el mejor pagado del mundo al menos durante unos años.
Messi exigió que figurara una cláusula donde se le garantizara que el Barça jugaría siempre en "una liga de primer nivel europeo", sin exigir que fuera la española, en caso de independencia. El argentino no quería acabar jugando una liga regional catalana o incluso una inclusión en la liga francesa, de mucho menor nivel que la española, la inglesa o la italiana, por dar algunos ejemplos.
Hay que recordar que, como se estudió en su momento cuando peligraba la llegada de una independencia política catalana, la Ley del deporte impediría que las entidades de la región pudieran seguir compitiendo en las ligas españolas. Messi hizo figurar en dicha cláusula que, en ese caso, pudiera salir gratuitamente del club para fichar por cualquier otro sin necesidad de pagar su coste de 700 millones de euros.
La renovación de Messi a inicios de diciembre del año pasado supondrá que el argentino pase a ganar 35 millones de euros limpios por temporada. Eso implica pagar aproximadamente entre 70 y 80 millones brutos, antes de impuestos, para que al jugador se le quede esa cifra neta.
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