La lotería llega con antelación a Castilla-la Mancha

Castilla-La Mancha recibirá 11,6 millones de euros del Gobierno central para empezar a aplicar la Ley de Dependencia en la Comunidad Autónoma, en virtud del convenio firmado entre la secretaria de Estado de Asuntos Sociales, Amparo Valcarce, y el consejero de Bienestar Social, Tomás Mañas.

La rúbrica, presidida por el responsable de la Comunidad Autónoma, José María Barreda, especifica la aportación que tanto el Ejecutivo central como el regional -que destinará 42,4 millones de euros- van a poner en marcha para financiar los diferentes servicios y obras derivados de la aplicación de la norma.

Durante el primer año de aplicación de esta Ley, las actuaciones que ha llevado a cabo el Gobierno de Castilla-La Mancha se han centrado en dar respuesta a las demandas de atención de las personas consideradas como grandes dependientes, 9.000 de las cuales ya han recibido alguna de las atenciones recogidas en la Ley.

Valcarce, quien recordó que la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a Personas en Situación de Dependencia marca "un antes y un después" en la atención a las personas discapacitadas, y ha tomado como referente a Castilla-La Mancha, y las "buenas prácticas" realizadas en esta región con los dependientes, los mayores, los discapacitados y sus familias.

"En esta Ley hay mucho de Castilla-La Mancha", subrayó la secretaria de Estado, quien recalcó el "liderazgo de Barreda y su gobierno" en el despliegue de la Ley de Dependencia, que calificó de "ejemplar y modélico" y como un ejemplo para otras comunidades autónomas y toda España.

A su juicio, cuando una Comunidad Autónoma contempla los intereses de los más necesitados gana en riqueza "pero también en dignidad", aseveró Valcarce, quien recordó que en el texto legislativo destaca, a imagen de Castilla-La Mancha, la figura del cuidador familiar, al que ahora se le garantiza "ayuda económica, alta en la Seguridad Social, tiempo de respiro y formación", declaró.

José María Barreda, por su parte, mostró su convencimiento de que "cuando el bienestar es insuficiente la democracia está incompleta", una máxima que, en su opinión, explica la gestión del Gobierno que preside a la hora de atender a los que más necesitan de la ayuda de los demás.

En cuanto al convenio, que permitirá una inversión de 54 millones de euros para financiar el programa de ayuda a domicilio, la concertación de plazas en residencias privadas y las obras de construcción y reforma de residencias públicas, Barreda indicó que "esto no ha hecho nada más que empezar", dijo.

Por último, remarcó el compromiso del Ejecutivo regional con el cuarto gran pilar de Estado del Bienestar y con la igualdad y agradeció la presencia y la labor de los representantes de las distintas asociaciones que trabajan en el ámbito de la dependencia, a los que aseguró que "os seguiremos necesitando si cabe más que nunca" y les advirtió que entre todos "acertaremos más y mejor", concluyó.