La autopsia señala que Gabriel fue estrangulado y que murió el mismo día de la desaparición

Poco más se sabe desde que fue arrestada Ana Julia Quezada, quien trasportaba el cuerpo sin vida del niño tras sacarlo de un pozo donde lo tenía escondido, en una finca de la zona. Esta mujer de 43 años, novia de Ángel, padre de Gabriel, dominicana de origen, no ha querido aún confesar el haber cometido el crimen ante la Guardia Civil, ante quien está detenida.

Los agentes la arrestaron mientras cometía el delito, in fraganti, y tras ser grabada sin saberlo cuando cargaba con el cadáver del niño, envuelto en mantas y lleno de barro. Incluso siendo sorprendida negaba los hechos y aseguró más tarde que el coche no era suyo y que era inocente. Se desconoce si sigue sin declarar sobre su culpabilidad o su móvil.

Además, desde anoche se supo que Ana Julia es madre de dos niñas, una de ellas fallecida en 1996 supuestamente por un extraño accidente, al caer por una ventana de su casa. Ahora la Policía quiere reabrir la investigación y estudiar si pudo estar involucrada. En su día ya se sospechó de ella, pero no había pruebas.

En esta desaparición y muerte de Gabriel de nuevo se sospechó de ella desde el principio. Hoy hemos podido saber que la Guardia Civil informó a los padres de Gabriel que pensaban que ella estaba detrás de la desaparición y pidieron ocultar este hecho hasta que confesara o entregara el niño, en caso de seguir con vida.

Esta mañana de lunes, la madre, Patricia, ha exculpado radicalmente del asesinato del pequeño a su ex marido: "Él es una persona maravillosa, que nadie dude de él. Yo voy a estar a su lado porque tenemos que superar esto los dos juntos. Está destrozado, pero es muy difícil hacer la digestión de la pérdida de un hijo sabiendo que lo ha matado la persona a la que quieres".

Además de dar una lección de enteraza, también lo ha dado de ética, al pedir por favor a las personas que desde ayer se han movilizado para linchar públicamente a la detenida que no mantengan esta postura. "Se ha generado un movimiento muy bonito gracias a mi hijo. Me gustaría que continuara. Están apareciendo muchos mensajes pidiendo muerte o maldad. Entiendo que estas personas tienen la misma rabia que yo dentro, pero que lo usen para pedir bondad en el mundo. Que no pongan la cara de esta mujeren los sitios pidiendo cosas malas para ella", ha reclamado.

Por otra parte, Patricia reveló que casi desde el principio se dudó de la sospechosa, Ana Julia, pero que se intentó ocultarlo tanto por ella como por el padre de Gabriel para ablandarla y que entregara al niño si seguía vivo: "Tenía la esperanza de ablandarla y de que se viniera abajo. De que en algún momento lo soltara. Por eso, apelábamos a su conciencia en nuestras comparecencias". Por eso "no se podía decir nada, porque era parte de la investigación".