Aunque públicamente el Gobierno utiliza un discurso frío y contundente sobre el tema del posible acercamiento de presos de ETA una vez disuelta la banda terrorista, la realidad es otra. Instituciones Penitenciarias encargó el pasado mes de febrero un censo pormenorizado y con datos personales de los internos de la organización que se encuentra en segundo grado y sus progresos de reinserción, así como de la situación de los reclusos enfermos.
Esta información la ofrece el diario 'El País' este jueves y explica que la medida afecta a 40 de los 242 presos etarras en cárceles españolas. El Ministerio del Interior tilda el documento de "rutinario", mientras que fuentes penitenciarias aseguran que su fin es elaborar una lista de reclusos candidatos a ser acercado a cárceles vascas y navarras. Pese a todo, estas fuentes insisten: "Hoy por hoy no hay ninguna novedad en la política penitenciaria".
El presidente de la Agrupación de las Cuerpos de la Administración Instituciones Penitenciarias, José Luis Pascual, asegura a este diario, sin embargo, que la detallada petición de información sobre presos de ETA "ni es rutinaria ni casual" y que tiene como objetivo "elaborar una lista de presos a los que se les se pueda acercar a cárceles del País Vasco y Navarra cuando el Gobierno decida dar ese paso". De hecho, recuerda que ya fue la forma de proceder en 1998, durante el Gobierno de Aznar, cuando se hizo un registro parecido para elaborar el listado de presos de ETA a los que entonces se acercó a cárceles vascas y navarras durante la tregua.
ETA tiene un total de 294 presos, de los cuales casi todos, 242, están en cárceles españolas. El resto están en Francia (51) y Portugal (1). Sólo 9 están en cárceles vascas o navarras.
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