La vicepresidenta Carmen Calvo, tras su visita ayer al Vaticano, ha garantizado hoy ante los medios que en ningún caso los restos mortales de Franco acabarán en la cripta de la catedral de la Almudena, en pleno centro de Madrid.
Tras las presiones de sus socios en la moción de censura, en especial Izquierda Unida y Podemos, el Ejecutivo socialista se ha puesto las pilas para parar los pies a la familia del dictador, que había elegido la Almudena a modo de 'venganza' por la salida del cuerpo de Franco del Valle de los Caídos.
En declaraciones a los medios, Calvo ha dicho que el Gobierno está dispuesto a impedir a través de la Ley de Memoria Histórica tal inhumación en pleno centro de la capital española. La vicepresidenta de Sánchez asegura que "el propio cardenal Osoro dijo que no les parece bien, acordamos trabajar de manera conjunta para encontrar una salida que obviamente no puede ser la Almudena".
El Gobierno exigirá que el lugar elegido sea "un lugar en condiciones de dignidad, pero en ningún lugar en los que pueda ser objeto de ningún tipo de homenaje". Una alternativa, como se aseguraba en la prensa de hoy, sería el cementerio de Mingorrubio, situado al lado de El Pardo, Madrid. En ese camposanto están enterradas varias personalidades de la dictadura franquista, como la propia esposa de Franco, Carmen Polo, así como dos presidentes de sus gobiernos -Luis Carrero Blanco y Carlos Arias Navarro. También otras personalidades como José María Pemán.
Este cementerio está ubicado en Mingorrubio, núcleo de población perteneciente a Madrid, pero en El Pardo, lugar totalmente alejado de la ciudad aunque administrativamente pertenezca a la misma. El Pardo está a 13 kilómetros de la ciudad.
Si (
No(
