La Comisión Europea ha finalizado este jueves el documento de acuerdo para el Brexit, titulado formalmente 'Declaración Política sobre la futura relación de la UE con Reino Unido'. En él no se explicita la relación futura de España con Gibraltar, y el texto tendría que ser votado en la cumbre europea del domingo 25. Ahora nuestro Ejecutivo debe analizar si las condiciones son suficientemente satisfactorias para no negarse al pacto y por tanto no vetar el acuerdo final.
La Comisión Europea ha enviado a todas las capitales de los países miembros de la UE el documento para lograr el acuerdo de salida de Reino Unido, consistente en 26 páginas y 147 apartados. El texto cuenta con el visto bueno preliminar del Ejecutivo británico, pero no del español, que se niega a votar a favor si no hay una referencia explícita a Gibraltar de forma que sendos países puedan negociar las condiciones de las relaciones futuras para el Peñón, y no sólo con acuerdos UE-Reino Unido.
El documento ha dado un paso positivo para España porque elimina cualquier referencia directa al artículo 184 del Acuerdo de salida, que era al que se negaba nuestro país. El Gobierno Sánchez consideró que ese artículo no aclaraba si la futura relación de Gibraltar dependerá siempre del visto bueno de España, que es una exigencia nacional.
Los 27 Gobiernos de la UE tienen que revisar ahora el texto y decir el viernes si están de acuerdo, para llegar a tiempo al domingo 25, día de la cumbre.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la primera ministra británica, Theresa May, conversaron anoche por teléfono tras la amenaza española de votar en contra del acuerdo. Ambos mantuvieron una "larga conversación", en la que Sánchez trasladó la oposición de España el acuerdo tal y como está redactado actualmente "en defensa de los intereses" del país.
El presidente recordó que él siempre ha demostrado una actitud "europeísta" y constructiva en las negociaciones del Brexit, a lo largo de las cuáles siempre ha expresado de manera "transparente" su postura y líneas rojas, por lo que admitió que en el Gobierno se han sentido "contrariados" al revisar el borrador final del acuerdo. Según Sánchez, la redacción actual del artículo 184 del tratado de retirada "pone en cuestión la capacidad española de negociar con Reino Unido el futuro de Gibraltar" y esto "no es aceptable".
Por su parte, May recalcó que "no excluirá" a Gibraltar de las negociaciones con la UE para establecer la directrices de la relación futura tras el Brexit. La primera ministra británica afirmó que el Peñón estará "cubierto" en las futuras negociaciones y recordó que ya ha estado "plenamente implicado" en la fase de diálogo". "Queremos un acuerdo que sirva para toda la familia de Reino Unido y eso incluye a Gibraltar", dijo.
El ministro de Exteriores, Josep Borrell, recalcó que España quiere que no haya "ninguna duda jurídica" sobre la situación futura de Gibraltar en el acuerdo de salida del Reino Unido de la UE. En la sesión de control del Congreso, el ministro explicó que hay desacuerdo en la situación de Gibraltar y su relación futura entre la UE y el Reino Unido y que las negociaciones sobre la misma son aparte.
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