El líder del PP, Pablo Casado está decidido a reeditar la 'vía andaluza' tras las elecciones generales, tanto es así, que ha invitado a Vox a formar parte de su Gobierno si las tres derechas logran imponerse en las urnas. "¿Para qué vamos a andar pisándonos la manguera entre nosotros si lo que tenemos que hacer es sumar?", se ha preguntado en una entrevista en 'EsRadio', en la que dejado claro que tanto la ultraderecha como Cs "van a tener la influencia que ellos quieran". Sus palabras no le han sentado muy bien al líder de Cs, Albert Rivera, que si bien no descarta pactos con Vox, insiste en que no es el momento de "repartir ministerios".
"Al final, Vox y Ciudadanos, tengan 10 o tengan 40 escaños, van a tener la influencia que ellos quieran tener para entrar en el Gobierno o para decidir la investidura o la legislatura. Por tanto, ¿para qué vamos a andar pisándonos la manguera entre nosotros si lo que tenemos que hacer es sumar?". Así se ha manifestado el líder del PP, Pablo Casado al ser preguntado por la posible entrada de Vox en un hipotético gobierno liderado por el PP.
Casado comenzó la legislatura proclamándose como la opción "útil" de la derecha para desbancar al PSOE de Pedro Sánchez, pero la influencia de Vox en la campaña llevó a Génova a abrazar algunos de los postulados de la extrema derecha, alegando que así los potenciales votantes de Vox podían "volver a votar al PP".
En un mitin en Valencia, se ha vuelto a dirigir a los posibles votantes de Vox y de Ciudadanos. "Si no quieren que España se fracture ni que haya una crisis de caballo como en 2008 la única opción válida que aglutine los votos en escaños es la del PP", ya que según ha dicho, "ante la fractura de la unidad nacional, el blanqueamiento del terrorismo etarra y la homologación del populismo bolivariano, hay que unir el voto".
A renglón seguido ha reiterado de forma velada su invitación a Vox. "Quiero un partido abierto a todos, una mayoría imbatible y volver a admirar a España con un PP en el que todo el mundo se sienta partícipe. Estamos orgullosos de los muchos aciertos y hemos aprendido de los errores. No les vamos defraudar, vamos a gobernar y a recuperar el gran nombre de esta nación después de unos meses terribles. No vamos a renunciar ni a nuestros principios, ni valores ni programa, pero necesitamos unir el voto y luego ya hablaremos con el resto de partidos".
El líder del PP, consciente de que necesitará acuerdos con Cs y la extrema derecha, quiere reeditar la 'vía andaluza', aunque ahora incluyendo a Vox en el Gobierno.
Su invitación no le ha sentado bien al presidente de Cs, Albert Rivera, que aunque no descarta pactos con Vox y mantiene su veto al PSOE, no quiere hablar de la entrada de Vox en el Gobierno.
Rivera ha abroncado a Casado por dedicarse a "repartir ministerios cuando es el momento de concentrarse en echar a Sánchez".
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