El PSOE no disimula: cualquier pacto con Podemos llegará ya tras las elecciones del 26-M

El PSOE ya no disimula a escasos días para las elecciones autonómicas, europeas y municipales del 26 de mayo: cualquier pacto con Unidas Podemos llegará ya tras las elecciones del 26-M, para no contaminar este proceso en las urnas. Algo que se daba por hecho, pero no que se admitiría a las claras por los socialistas. Es lo que ha reconocido José Luis Ábalos, secretario de organización del PSOE, quien ayer habló de tener "las puertas abiertas a la colaboración" con la izquierda, sin dar más detalles.

Sin embargo, explicó que esas puertas abiertas a la colaboración "ha sido así hasta ahora" y en relacion a los "11 meses de mucha colaboración", en referencia a este periodo de transición desde la moción de censura a Rajoy y la celebración de las elecciones generales. "Hemos dicho reiteradamente que nos queda una experiencia muy positiva, que nuestro propósito es renovar esa agenda y, a partir de ahí otras formas de colaboración habrá que ir concretándolas", reiteró, insistiendo en que la única vía abierta es que Podemos e IU apoyen su Ejecutivo sin pedir nada a cambio en forma de carteras o altos cargos.

Sobre la posibilidad de hacer oficial cualquier acuerdo con la izquierda, Ábalos fue claro: "Cuando acabe el periodo electoral que es lo normal y lo lógico y se inicie un proceso de investidura, que se aplaza hasta el final de la campaña". Se negó a concretar si el PSOE permitiría que Pablo Iglesias o alguien propuesto por su partido entrase en el futuro gobierno, apuntando a que lo importante es la "colaboración".

Pero hay 2 claves de aquí a los próximos meses: la formación de Iglesias sí exigirá ministerios a cambio de apoyos en gobiernos autonómicos, ya que el PSOE ganará en casi todas las comunidades en las próximas elecciones, pero necesitará apoyos de la izquierda para formar ejecutivos regionales. Además, también sucederá ese mismo tipo de pactos en muchos ayuntamientos, así que Podemos hará todo lo posible para exigir carteras o la máxima influencia y presencia posible en el futuro Ejecutivco central, sin excusas.

Sin embargo, por lo que se ha ido pudiendo conocer, la fórmula deseada en el PSOE es repetir la fórmula 'portuguesa': gobernar en solitario y sólo llegar a con acuerdos programáticos con los partidos de la izquierda, que en esta legislatura serán varios y no sólo Podemos e IU. Serán claves también Compromís y Esquerra Republicana, además de los regionalistas cántabros de Revilla, el PRC, que obtuvieron un escaño.