Se cierra la puerta a una salida china a la crisis de Gareth Bale

El Real Madrid se queda sin la opción de vender al ya molesto Gareth Bale a un club chino. En concreto se había interesado por el galés el millonario Jiangsu Suning, pero la complicaciones de la operación han hecho que esta entidad cerrase la puerta a Bale y haya optado por otro fichaje europeo, el del croata Ivan Santini.

Bale había entendido al fin el mensaje de Zidane, que por activa y por pasiva dejó claro que no contaría con él durante la temporada, incluso ni sentándole en el banquillo. Una medida de presión impulsada desde el club para que el jugador se diera por vencido, ya que con su alta ficha que recibe cada temporada, no tenía el más mínimo interés en dejar la capital española. Pero tras esos primeros gestos de su entrenador, Bale pidió a su representante, el controvertido Jonathan Barnett, que le buscase una salida atendiendo a las ofertas que habían llegado en los últimos meses.

Una de ellas era la oferta china del Jiangsu Suning, pero los clubes de este país no suelen pagar por los traspasos, y el Madrid, lógicamente, se negaba a dejarle salir gratis. Aunque se había hablado de una ínfima cantidad de unos 20 millones de euros como traspaso, la familia de Bale presionó al extremo para que no cediera, ya que no les convencías irse a vivir al país oriental. Al final, entre unos y otros, Bale optó por rechazar la oferta, así como el Madrid, que no estaba convencido en una salida gratuita.

Así las cosas, Bale seguirá los planes ya establecidos durante la pretemporada, aunque ambas partes están abiertas a cualquier alternativa. Hay dos clubes ingleses interesados, como ya se sabía, el Tottenham y el Manchester United, pero ninguno está dispuesto a pagar su alta ficha, dicen que de 17 millones limpios al año. El galés estaría encantado de volver a la Premier, pero no tiene suficiente crédito como para que se invierta tanto en asumir un salario tan alto a sus recién cumplidos 30 años.