El PSOE ha recordado que la investidura de Pedro Sánchez está condicionada a un acuerdo con Unidas Podemos, ya que de no atar previamente los apoyos, no habrá debate ni votación. Tras el fracaso de las negociaciones entre los equipos del PSOE y Podemos, Sánchez e Iglesias cruzaron reproches y acusaciones en el Congreso, pero el líder 'morado' aseguró que pese a todo, llamaría por teléfono al socialista para tratar de retomar las conversaciones.
Y es que Pablo Iglesias cree que uno de los errores que cometió en julio fue precisamente dejar en manos de los equipos negociadores el procedimiento sin reuniones ni conversaciones entre los líderes de ambas formaciones. Por eso, y pese a que las negociaciones se encuentran encalladas, telefoneará a Pedro Sánchez en un último intento para evitar la repetición de elecciones.
Tras quejarse de que Sánchez no le ha llamado por teléfono en todo el verano, Iglesias tomó la iniciativa en el Congreso y emplazó al socialista a "sentarse a negociar". El presidente del Gobierno en funciones le respondió que solo retomaría los contactos si Iglesias renunciaba a la fórmula de la coalición. Ante la ausencia de avances, el líder de Podemos anunció 'La Llamada', que podría producirse este fin de semana.
La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, ha manifestado que no someterán a los ciudadanos a una "situación frustrante" con un nuevo pleno de investidura si Pedro Sánchez "no tiene los apoyos claros para que esa investidura salga adelante". Calvo ha aseverado que los socialistas volverían a la mesa con los 'morados' si se replantean la última oferta de Sánchez: un acuerdo programático y cargos en altas instituciones fuera del Consejo de Ministros.
Entre el lunes y el martes, el rey Felipe VI celebrará la ronda de consultas en la que los partidos le comunicarán sus posiciones ante la hipotética investidura, y decidirá si propone de nuevo a Pedro Sánchez como candidato.
Aunque todos los partidos dicen no desear las urnas, todos han puesto en marcha su maquinaria electoral con la vista puesta en las previsiones que arrojan las encuestas. Los sondeos parecen favorecer a los socialistas, pese a que dibujan un escenario político similar y no contemplan la más que probable alta abstención ante las cuartas elecciones generales en cuatro años.
Si (
No(
