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Un nuevo documento compromete a Rocío Monasterio: firmó como directora facultativa de obra sin ser arquitecta
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(Foto: Chema Barroso / MDO)

Un nuevo documento compromete a Rocío Monasterio: firmó como directora facultativa de obra sin ser arquitecta

martes 29 de octubre de 2019, 08:41h

La presidenta de Vox en Madrid y diputada autonómica, Rocío Monasterio, firmó como directora facultativa -cargo también conocido como dirección de obra y de ejecución- en un certificado de obra y un presupuesto para una obra en la calle San Marcos número 24 de Madrid en el año 2004, según un documento que ha hecho público 'eldiario.es'.

Sin embargo, en aquel momento Monasterio no tenía un título que le permitiera hacerlo ya que se colegió como arquitecta cinco años más tarde.

El director de obras es una figura obligatoria en obras con proyecto y responde al responsable del control técnico de la ejecución de obra asumiendo también tareas de coordinación de seguridad. Sólo aquellos técnicos con titulación de arquitecto, aparejador, ingeniero o ingeniero técnico pueden asumir una dirección de obra, explica en su web Arquitea.

Asimismo, el citado periódico rescata un número de la revista 'Habitania' del año 2003 en la que Monasterio ya se presentaba como "arquitecta especialista en modificar locales para convertirlos en loft".

Pese a que Monasterio no había acabado sus estudios, en el año 2000 fundó su propio estudio de arquitectura: Rocío Monasterio y Asociados.
Este documento se suma a los planos desvelados por 'El País' en los que se atribuyen a la "Arquitecta: Rocío Monasterio" la obra Pedro Heredia número 6. Una obra del año 2003, pese a no convertirse en arquitecta hasta el año 2009.

Asimismo, el Ayuntamiento de Madrid mantiene abierto un expediente informativo sobre una reforma y la venta de tres lofts que se construyeron en suelo industrial en el barrio de Salamanca con la intervención de Monasterio junto a su marido, el también dirigente de Vox y entonces promotor inmobiliario, Iván Espinosa de los Monteros. Varios de los inquilinos que adquirieron los inmuebles fueron desalojados una década después por no contar con la correspondiente cédula de habitabilidad.

A todo ello se añaden las irregularidades de su propio domicilio: un chalet de cuatro plantas que contaba con un estudio instalado sin licencia y que tuvo que ser clausurado. Además, Espinosa de los Monteros fue condenado en septiembre por haber dejado sin pagar parte del coste de las obras.

El matrimonio no ha explicado el motivo por el cual están firmados los citados documentos por Rocío Monasterio como arquitecta y directora facultativa, cargos para los que requería estar titulada sin que lo estuviera en esos momentos. Monasterio alegó un día antes no recordar unos planos del año 2003 y Espinosa de los Monteros aseguró que antes de que su mujer se colegiara como arquitecta sólo "firmaba labores de interiorismo que no requerían esa titulación" sin entrar en la contradicción con los documentos publicados.

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