La región de Cantabria va a pagar los platos rotos de la negociación entre PSOE y ERC para lograr la investidura de Pedro Sánchez. Así las cosas, Miguel Ángel Revilla, el presidente de esa comunidad autónoma, va a tener que elegir entre Sánchez o elecciones adelantadas.
Y es que el PSOE de esa región ha avisado al gobernante PRC que "si no rectifica" su 'no' a la investidura de Sánchez "habrá roto el pacto de Gobierno".
Así lo ha anunciado la secretaria de Organización del PSOE de Cantabria y portavoz del grupo socialista en el Parlamento de Cantabria, Noelia Cobo, tras valorar la decisión adoptada por la Ejecutiva del PRC de votar 'no' a la investidura de Sánchez. El secretario de Infraestructuras y Transportes de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE y diputado Pedro Casares cree que es una irresponsabilidad que los de Revilla se sumaran al bloqueo político junto al PP y Ciudadanos “con mentiras”.
El PRC gobierna Cantabria con sus 15 escaños más los 6 del PSOE, que superan la mayoría absoluta necesaria de 18 diputados. Son los dos únicos miembros de una fórmula gobernante porque sólo hay 3 partidos presentes más en la Cámara regional: PP, Ciudadanos y Vox, que juntos no suman una mayoría necesaria, teniendo 14 escaños en total, menos incluso que los que tiene el partido de Revilla.
Izquierda Unida ha reclamado “altura de miras” a la coalición para que “se centren en hacer y mejorar la comunidad” y “no gasten su tiempo y el de todos en repetir las tensiones de los últimos años”. Tras la negativa del PRC a apoyar la investidura de Sánchez “alineándose con la derecha más reaccionaria”, y la amenaza del PSOE de ruptura del pacto si los regionalistas no rectifican, desde IU declaran que “si no van a garantizar la estabilidad gubernamental mínima para sacar adelante políticas en beneficio de las familias cántabras, lo mejor es que el presidente Miguel Ángel Revilla disuelva el Parlamento y convoque nuevas elecciones”.
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