El rey Felipe VI ha enviado un breve mensaje a la nación ante la crisis del coronavirus, que se ha cobrado más de medio millar de vidas en nuestro país y más de 14.000 contagiados. El monarca ha trasladado su apoyo y agradecimiento a los profesionales sanitarios, ha llamado a "dejar de lado las diferencias y estar unidos en torno al objetivo de superar esta situación". Mientras pronunciaba su discurso, ciudadanos en diferentes ciudades del país han respondido con una 'cacerolada'.
"Estamos haciendo frente a una crisis nueva y distinta, sin precedentes, muy seria y grave, que pone en riesgo nuestra salud en cada rincón de España. Pero también, y de forma muy traumática, altera y condiciona nuestras costumbres y el desarrollo normal de nuestras vidas, el empleo y nuestras empresas; en definitiva, nuestro bienestar", ha manifestado el monarca.
Felipe VI ha afirmado que "hoy es más de justicia que nunca dar las gracias a todas las personas, entidades y servicios públicos que se están sacrificando por los demás; sabíamos que tenemos gran sistema sanitario con grandes profesionales, a los que me quiero dirigir para trasladar nuestra admiración, respeto y apoyo, porque sois nuestra primera línea de defensa".
El Rey se ha referido a los aplausos que cada día los ciudadanos brindan a los profesionales sanitarios por su labor, "un aplauso emocionante, sentido, sincero y justo que seguro que os reconforta y anima".
"Hay momentos en la Historia de los pueblos en los que la realidad nos pone a prueba de una manera difícil, dolorosa y a veces extrema; momentos en los que se ponen a prueba los valores de una sociedad y la capacidad misma de un Estado. Estoy seguro de que todos vamos a dar ejemplo, una vez más, de responsabilidad, de sentido del deber, de civismo y humanidad, de entrega y esfuerzo y, sobre todo, de solidaridad –especialmente con los más vulnerables–, para que nadie pueda sentirse solo o desamparado. Ahora debemos dejar de lado nuestras diferencias. Debemos unirnos en torno a un mismo objetivo: superar esta grave situación. Y tenemos que hacerlo juntos; entre todos; con serenidad y confianza, pero también con decisión y energía", ha señalado.
El Jefe del Estado ha llamado a los ciudadanos a "resistir, aguantar y adaptar nuestros modos de vida y nuestros comportamientos a las indicaciones de nuestras autoridades y a las recomendaciones de nuestros expertos para ganarle al virus".
"Esta es una crisis temporal. Un paréntesis en nuestras vidas. Volveremos a la normalidad. Sin duda. Y lo haremos más temprano que tarde: si no bajamos la guardia, si todos unimos nuestras fuerzas y colaboramos desde nuestras respectivas responsabilidades.Este virus no nos vencerá. Al contrario. Nos va a hacer más fuertes como sociedad; una sociedad más comprometida, más solidaria, más unida. Una sociedad en pie frente a cualquier adversidad", ha zanjado.
Mientras Felipe VI pronunciaba su discurso, ciudadanos de todo el país han participado en una 'cacerolada' de protesta, que ha sido secundada en numerosas ciudades.